Converg¨¨ncia se moviliza para evitar que Roca deje la direcci¨®n del partido
El peligro de que se rompa el binomio Jordi Pujol-Miquel Roca, que ha dirigido los destinos de Converg¨¦ncia Democr¨¢tica de Catalunya (CDC) desde su fundaci¨®n, en 1974, se hizo ayer patente incluso para los m¨¢s incr¨¦dulos. Pasados los primeros momentos de estupor, el partido se moviliz¨® ayer en defensa de la permanencia de su secretario general. Primero Roca y despu¨¦s Pujol eludieron pronunciarse sobre el deseo del primero de abandonar la secretar¨ªa general tras las elecciones de mayo.
El fantasma de que con sucesos como ¨¦ste comenz¨® el fin de la Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico plane¨® por los despachos de CDC. A diferencia de otras ocasiones, en que Pujol y Roca se apresuraron a desmentir noticias que m¨¢s tarde se confirmar¨ªan, ayer dieron la sensaci¨®n de no tener inconveniente en que se trasladara a la opini¨®n p¨²blica que sus divergencias son reales. El presidente de Converg¨¨ncia y de la Generalitat, Jordi Pujol, indic¨® en una escueta declaraci¨®n hecha a trav¨¦s de sus portavoces que ni confirmaba ni desment¨ªa nada: "No quiero hacer ning¨²n comentario", dijo.Roca hizo p¨²blico un comunicado en el que se?alaba que, en estos momentos, lo importante es la crisis del golfo P¨¦rsico. "Parece mentira que en plena crisis del Golfo y con problemas tan importantes que afectan al conjunto de la sociedad catalana se pueda perder un segundo en temas como ¨¦ste [su anuncio de dimisi¨®n]", indica Roca en la nota.
Las evasivas de Pujol y Roca contrastaron con el estupor y preocupaci¨®n que entre los dirigentes de Converg¨¨ncia caus¨® la noticia [v¨¦ase EL PA¨ªS de ayer]. S¨®lo los colaboradores del secretario general que ten¨ªan conocimiento directo de su decisi¨®n se mantuvieron tranquilos. De la extra?eza inicial de las primeras horas de la jornada se pas¨® a una oleada de adhesiones pol¨ªticas y personales hacia Roca, quien permanec¨ªa encerrado en su despacho, al tiempo que dirigentes del partido ped¨ªan la movilizaci¨®n de la organizaci¨®n para evitar su abandono.
El convencimiento generalizado entre los dirigentes de CDC de que uno de los activos m¨¢s importantes del partido es la pareja Pujol-Roca, llevaba a muchos de ellos a afirmar que ninguno de los dos es libre para adoptar una decisi¨®n tan importante. Si el secretario general perseverara en su intenci¨®n de abandonar, destacados miembros del aparato fieles a Roca sugieren que ellos plantear¨ªan una grave disyuntiva: o recuperar a Roca o irse con ¨¦l.
M¨¢s poder
"Llevadas las cosas al extremo de redefinir las funciones de los dirigentes y el liderazgo del partido para la pr¨®xima d¨¦cada, quiz¨¢ sea necesario romper el silencio", indic¨® un diputado. "Yo no quiero tener que elegir; que Pujol no me coloque en esa tesitura", se?al¨® otro. ?ste asegur¨® que, en el seno del partido hay una opini¨®n generalizada favorable a que el secretario general pase de ser el eterno n¨²mero dos y un sucesor cuestionado en ocasiones, a "ocupar el n¨²mero uno bis". "Es el momento de que Pujol empiece a compartir el poder con Roca; ya no s¨¦ trata de la sucesi¨®n, sino de c¨®rno arreglamos el presente", manifest¨® un destacado miembro del comit¨¦ ejecutivo de Converg¨¦ncla. Fuentes pr¨®ximas a Roca, citadas por la agencia Efe, resumieron la situaci¨®n con una frase del Cantar del M¨ªo Cid: "Qu¨¦ buen vasallo, si hubiere buen se?or".
Pujol mantuvo ayer una coriversaci¨®n con Roca en la que analizaron las confidencias del secretario general y las repercusiones que ten¨ªan en plena precampa?a electoral.
Nada se sabe de esta conversacl¨®n, aunque la nota p¨²blica del secretario general -que no fue un ment¨ªs- desagrad¨® a su presidente, quien pretend¨ªa un distanciamiento m¨¢s radical de la noticia.
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