"Israel no necesita ni a Europa ni a la ONU"

Hay pocas cosas que Isaac Rabin no haya sido en Israel a sus 67 a?os. Comandante en la guerra de 1948; general jefe de Estado Mayor en la guerra de los Seis D¨ªas, en 1967; embajador de Israel en Washington en 1969; primer ministro en 1974; l¨ªder de la oposici¨®n despu¨¦s, y ministro de Defensa entre 1984 y 1989. Rabin considera que, de cara a unas negociaciones internacionales para resolver la cuesti¨®n palestina, Israel deber¨¢ contar con el paraguas de EE UU y de la URSS pero no con el de Europa ni de la ONU.

Hace cosa de un a?o, Isaac Rabin desafi¨® a Simon Peres para recuperar el liderazgo de su partido, el Laborista, y perdi¨® Pero es probable que vuelva a intentarlo antes de las pr¨®ximas elecciones. A diferencia de lo que han declarado algunos miembros del Gabinete israel¨ª, Rabin considera que a pesar de que la guerra en el Golfo "no ha terminado y nadie puede estar seguro de que no se mantiene la amenaza para Israel", su pa¨ªs "no debe hacer nada si no se produce una escalada en los ataques iraqu¨ªes".Pregunta. Algunos estrategas sugieren que subsiste otro escenario de posible intervenci¨®n israel¨ª, en este caso sobre Jordania, si el reino hachemita se desestabilizara y hubiera una escalada de incidentes fronterizos.

Respuesta. Me parece un completo sinsentido. Si Israel quisiera da?ar el objetivo de la coalici¨®n internacional le bastar¨ªa con poner en pr¨¢ctica ese enfoque. El principio b¨¢sico de esta guerra es la no utilizaci¨®n de la fuerza para la resoluci¨®n de problemas. Segundo, pol¨ªticamente ser¨ªa tambi¨¦n idiota ?Acaso necesitamos m¨¢s territorios? Tercero, no estoy enamorado del rey Hussein pero minar su r¨¦gimen es lleva el r¨¦gimen de la OLP a Jordania o, lo que no es mejor, el fundamentalismo isl¨¢mico. Cruzo los dedos para que el rey Hussein sobreviva.

El fracaso de Arafat

P. El Gobierno ha dejado claro su rechazo de cualquier conferencia internacional de paz. ?Est¨¢ de acuerdo?

R. Creo que lo primero ser¨ªa parar resueltamente el problema palestino. En esa tarea no me aparto de lo que fue la propuesta del Gobierno de unidad nacional, en mayo de 1989. Explotar el fracaso adicional de Arafat y de su juego. Buscar un respaldo ¨¢rabe para los palestinos de los territorios a fin de que puedan celebrar elecciones y luego autogobernarse. Ese respaldo ser¨ªa Egipto, o quiz¨¢ Arabia Saud¨ª. M¨¢s tarde, tras un periodo de transici¨®n limitado, negociar una soluci¨®n permanente, en plano de igualdad, entre Israel, los palestinos y Jordania, si quiere. Para ello necesitamos un paraguas internacional, que deber¨ªan ser Estados Unidos y la URSS, si normaliza sus relaciones con Israel. Al mismo tiempo, deber¨ªamos abrir negociaciones con Siria, en un nivel estrictamente bilateral, y sin vinculaci¨®n con el foro palestino, bajo el mismo paraguas de Estados Unido y la Uni¨®n Sovi¨¦tica.

Peor que Egipto

P. ?Y Europa?

R. No necesitamos a la ONU ni a los europeos. Israel tendr¨ªa que perder la cabeza para dar entrada en la negociaci¨®n a unos pa¨ªses que no han cambiado su actitud b¨¢sica sobre el problema ¨¢rabe-Israel¨ª, con una orientaci¨®n peor que la de Egipto. ?Merece Francia tanta compensaci¨®n por la guerra del Golfo, cuando fue uno de los que m¨¢s ayud¨® a la construcci¨®n de la fuerza iraqu¨ª?

P. ?Concibe la existencia de un Estado palestino al final del proceso?

R. No, en estos momentos, en modo alguno. Es necesario que exista una entidad palestina en los territorios. Pero les hemos visto bailar en los tejados cuando ca¨ªan los Scud sobre Tel Aviv. Tenemos todo el derecho a sospechar de ellos. Tenemos el derecho a ver qu¨¦ pasa al menos en tres a?os, antes de sacrificar ning¨²n inter¨¦s vital para la seguridad de Israel.

De cara a la soluci¨®n permanente, me opongo a tres cosas: a la creaci¨®n de un Estado palestino independiente; a una nueva divisi¨®n de Jerusal¨¦n, que debe seguir bajo soberan¨ªa de Israel, y a la anexi¨®n del grueso de los territorios, de las zonas ¨¢rabes densamente pobladas, insistiendo en que la frontera de defensa de Israel debe ser el r¨ªo Jordan.

Si me pregunta por mi soluci¨®n permanente preferida, ser¨ªa que la zona de autogobierno palestino y las zonas de los territorios que se incluyeran en Israel fueran parte de un Estado jordano-palestino, o incluso de una federaci¨®n con Israel, en la que habr¨ªa uno o dos cantones palestinos. Eso se logr¨® en Suiza, entre alemanes, franceses e italianos.

P. Se dice que existe una segunda generaci¨®n pol¨ªtica en Israel, m¨¢s moderada que la suya.

R. La generaci¨®n que naci¨® en la guerra del 67 siente el odio palestino revelado por la Intifada. Hay en ella m¨¢s extremismo de derechas que en la generaci¨®n anterior. Los sondeos revelan que los de menos de 35 a?os son halcones.