Entre juicios

CH. N. Las v¨ªctimas del aceite de colza viven entre dos juicios. El primero, contra los industriales -ya celebrado-, provoc¨® ira y desaliento entre los afectados por el envenenamiento.

El segundo juicio, contra miebros de la Administraci¨®n, puede comenzar este a?o. De ¨¦l depende el pago de fuertes indemnizaciones. Est¨¢n encausados cinco representantes de la Administraci¨®n Central que entonces ten¨ªan a su cargo direcciones generales o puestos inferiores- y cuatro de distintas administraciones locales.

Los afectados del s¨ªndrome son pesimistas. Temen que no haya sanci¨®n suficiente para los responsables (le aquel envenenamiento. En cualquier caso, nada les devolver¨¢ la salud ni los a?os perdidos.

A trav¨¦s de, sus abogados, han recurrido la sentencia del juicio contra los industriales responsables del aceite desnaturalizado, emitida en mayo de 1989 despu¨¦s de quince meses de vista oral. Los defensores de los procesados tambi¨¦n han recurrido ante el Tribunal Supremo.

S¨®lo dos de los 37 juzgados en la madrile?a Casa de Campo -Juan Miguel Bengoechea y Ram¨®n Ferrero-tuvieron que ingresar en prisi¨®n tras la v¨ªsta. Una decena de ellos -Jorge Pich, El¨ªas Ferrero, C¨¢ndido Hern¨¢ndez, Enric Salom¨®, Ram¨®n Alabart, Agust¨ªn y Tom¨¢s Baviera, Florencio Fe?jo¨®, Juan Antonio Pastor Ruiz, Adela Jaureta y Ram¨®n Navarro- fueron condenados, pero no ingresaron en prisi¨®n por haber cuplido la pena impuesta con el tiempo pasado en prisi¨®n preventiva. El resto de los procesados fueron absueltos.

Tampoco han llegado las indemnizaciones por la presunta responsabilidad subsidiaria de la Administraci¨®n. "Este segundo juicio podr¨ªa ser inmediato. Est¨¢ pendiente de que la sala se?ale la fecha", afirma Francisca Sauquillo, abogada de 3.000 afectados. En todo este tiempo, los afectados han recibido indemnizaciones por los fallecimientos: cuatro millones de pesetas cuando la v¨ªctima era el cabeza de familia y tres millones por los dem¨¢s miembros.

Indemnizaciones y ayudas

Durante la d¨¦cada transcurrida, la Administraci¨®n ha ido arbitrando varios tipos de ayudas, desde el complemento econ¨®mico en caso de que los ingresos sean escasos hasta medidas tendentes a la reinserci¨®n laboral o escolar. Sin embargo. Las asociaciones critican, por inadecuado, el sistema de prestaciones que reciben. "Se est¨¢ haciendo todo lo que se puede. La cobertura es suficiente. Buscamos favorecer la reinserci¨®n laboral, escolar y sociocomunitaria", responde el director de la Oficina de Gesti¨®n de Prestaciones Econ¨®micas y Sociales del S¨ªndrome T¨®xico, Carlos Garc¨ªa Cano.