Amenaza en el valle del Lozoya
Los ¨²ltimos fines de semana han vuelto a poner de manifiesto la indefensi¨®n del m¨¢s extenso espacio natural madrile?o, comprendido entre las cumbres de Pe?alara y la carretera de Burgos, entre la divisoria de Segovia y la alineaci¨®n de Cabezas de Hierro. Su eje es el valle del Lozoya, un territorio valioso que sigue, un a?o m¨¢s desprotegido ante el aluvi¨®n de veraneantes.La experiencia del ¨²ltimo fin de semana por la zona merece toda la alarma del mundo. Junto a la m¨¢s secreta de las lagunas glaciares de Pe?alara, la de los P¨¢jaros, campistas salvajes esparc¨ªan basuras y ruidos.
En el puerto del Revent¨®n, unas 15 motos trial, procedentes de La Granja, hac¨ªan camino hacia el monasterio de El Paular. Un reguero de botes met¨¢licos de usar y tirar marcaba el camino hacia la cumbre forestal de Cabeza Mediana. Aqu¨ª, donde se sit¨²a una de las concentraciones de buitres negros m¨¢s importantes de Europa, ocho veh¨ªculos todo terreno bat¨ªan la zona. Las rodadas todav¨ªa permanecer¨¢n sobre el pastizal destruido junto a la Sillada de Garci Sancho...
En el fondo del valle, una quincena de coches eran lavados en el arroyo truchero de la Umbr¨ªa. Hab¨ªa incluso quien cambiaba el aceite. Rumbo al puerto de la Morcuera, sorprend¨ªa el hedor del basurero municipal de Rascafr¨ªa. Hace dos a?os, el director de la AMA aseguraba que dicho "foco tercermundista" iba a ser clausurado.
En el refugio de la Morcuera, desde donde se contempla la mejor panor¨¢mica del valle del Lozoya, el monasterio de El Paular, Pe?alara, se abarcaba de un vistazo el territorio del parque natural tantas veces solicitado. Un enorme mont¨®n de basuras recordaba una competici¨®n ciclista que recorri¨® el lugar.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.