Vera afirma que es muy dif¨ªcil que Amedo desviara fondos reservados para financiar a los GAL
El secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, testific¨® ayer en el juicio del caso Amedo que llevaba personalmente la contabilidad de los fondos reservados de su departamento y que, aunque no exist¨ªa justificaci¨®n documental de los gastos, los mecanismos de control eran tan estrictos que es casi imposible que Amedo u otro funcionario hubiera podido desviar dichos fondos para financiar los GAL o cualquier otra actividad que no estuviera relacionada con la seguridad del Estado. Por dos veces en el sumario 1/88, el juez Baltasar Garz¨®n aludi¨® a que los GAL fueron financiados con fondos reservados del Ministerio del Interior que fueron desviados de forma dolosa por alg¨²n funcionario incontrolado.
El tema de los fondos reservados volvi¨® ayer a ser la estrella de la sesi¨®n. Vera y otros dos funcionarios supuestamente encarga dos de la contabilidad se negaron a explicar el funcionamiento y mecanismos de control de esos gastos alegando su naturaleza se creta, al igual que en d¨ªas pasados hicieron el ex ministro del Interior Jos¨¦ Barrionuevo y varios altos cargos policiales.El di¨¢logo entre el letrado Jos¨¦ Luis Gal¨¢n y Vera fue as¨ª:
Gal¨¢n: ?Est¨¢ a su cargo una de las tres partidas que sobre fondos reservados hay en el Ministerio del Interior?
Vera: S¨ª.
G.: ?En noviembre de 1986 se libraron tres millones para Amedo?
V.: Sobre el movimiento de fondos no puedo hablar porque son temas relacionados con la seguridad del Estado. Pero no me consta un libramiento de esas caracter¨ªsticas.
G.: ?La contabilidad de los fondos reservados la llevaba usted personalmente?
V.: S¨ª, personalmente
G.: ?Era usted auxiliado en esa tarea por otras personas?
V.: S¨ª, por funcionarios.
G.: ?Luis Bernaldo de Quir¨®s era uno de ellos? [Esta persona estaba encargada de la coordinaci¨®n de esos fondos, seg¨²n public¨® EL PA?S el 4 de noviembre de 1988]
V.: Ha sido mi secretario particular, pero ten¨ªa las funciones propias de un secretario particular, aquellas que yo le encomendaba.
G.: ?Es cu?ado de usted?
V.: S¨ª, es cu?ado m¨ªo.
G.: ?Juan Antonio M¨ªnguez era auxiliar en estas tareas del se?or Bernaldo de Quir¨®s?V.: No. Es el jefe del servicio de gesti¨®n econ¨®mica de la Secretar¨ªa de Estado para la Seguridad, y se encarga de administrar todas sus partidas presupuestarlas. (Ambos funcionarios testificaron tambi¨¦n ayer e igualmente se negaron a revelar nada relativo a los fondos).
G.: ?Queda constancia de los funcionarios o las zonas policiales a las que se hace entrega de fondos?
V.: No, no queda constancia.
G.: Entonces, ?c¨®mo puede llevarse esa contabilidad?
V.: No le puedo dar m¨¢s datos sobre ese tema porque corresponde a la seguridad del Estado. Es un elemento fundamental, y como tal me parece que no puedo darle datos.
Tras nuevas preguntas del abogado de la acci¨®n popular, el secretario de Estado para la Seguridad afirm¨®: "Le puedo asegurar que con los controles que existen sobre funcionamiento de fondos reservados, que son muy estrictos, es muy dificil desviar fondos para cosas ajenas a la seguridad del Estado".
Vera neg¨® que hubiera una organizaci¨®n que respaldara a los comandos de acci¨®n de los GAL a los que calific¨® de grupos inconexos. Lo dijo de la siguiente forma:
Castells: Sobre los GAL. ?Los comandos estaban formados por grupos de mercenarios?
Vera: S¨ª, parece que es as¨ª.
C.: ?Puede dar datos sobre la organizaci¨®n que les pagaba?
V.: Tengo muchos a?os de experiencia en los temas de seguridad en este ministerio y a m¨ª no me ha parecido nunca que haya una determinada organizaci¨®n detr¨¢s. Yo creo que son grupos inconexos, y como usted ha dicho mercenarios.
C.: Si son mercenarios, cobraban una merced, luego hab¨ªa una organizaci¨®n que les pagaba.
V.: Una organizaci¨®n o personas aisladas.
Vera dijo que ha llevado personalmente las relaciones con Francia, que no conoc¨ªa las actividades de Amedo, y que no iniciaron una investigaci¨®n cuando recibieron la orden de busca y captura contra ¨¦l porque sus jefes dieron informes favorables. Neg¨® que la libertad de Amedo y Dom¨ªnguez se hubiera utilizado como moneda de cambio en las conversaciones de Argel.
El final del interrogatorio de Vera se desarroll¨® as¨ª:
Gal¨¢n: ?Qu¨¦ garant¨ªas o promesas les han dado a esos se?ores [Amedo y Dom¨ªnguez] para solucionar el tema de su libertad si contin¨²an en silencio?
Vera: No entiendo la pregunta, no ha habido ninguna garant¨ªa.
Presidente: Se?or letrado, la sala entiende que est¨¢ insinuando conductas delictivas...
G.: He preguntado, me dice que no, y me doy por satisfecho.Masa y la luna
El teniente coronel Rafael Masa, al que se ha implicado en la compra de armas para los GAL tambi¨¦n testific¨® ayer. Masa admiti¨® ante el Tribunal que ha sido condenado por delito de prevaricaci¨®n a la pena de seis a?os y un d¨ªa de inhabilitaci¨®n pero que todav¨ªa no le ha sido notificada oficialmente la sentencia. El di¨¢logo m¨¢s interesante que sostuvo con el abogado Gal¨¢n fue as¨ª:
Gal¨¢n: ?Ha estado en misi¨®n oficial en Andorra?
Masa: S¨ª, varias veces, a un seguimiento de gente de ETA que hab¨ªa en el Principado.
G.: ?Conoce la armer¨ªa Creaciones Rosell?
M.: S¨ª, la conozco, pero creo que era una tienda de deportes.
G.: ?Conoce a los hermanos Rosell?
M.: Conozco a los dos hermanos.
G.: Compr¨® 10 pistolas Sig-Sauer y Walter P-5?
M.: Eso es incierto.
G.: ?Ha comprado armas all¨ª?
M.: No.
G.: ?Ha comprado munici¨®n?
M.: Nunca.
G.: ?Qu¨¦ ha comprado entonces?
M.: Art¨ªculos de deporte.
G.: ?Dio usted a los hermanos un tel¨¦fono de Madrid para que le localizasen?
M.: No.
G.: ?El tel¨¦fono 410 29 43 le dice algo?
M.: No.
G.: Le refresco la memoria. Es un tel¨¦fono del Ministerio del Interior.
M.: Puede ser, no lo recuerdo.
G.: ?No es m¨¢s cierto que ha mantenido reuniones en Andorra con Amedo y Dom¨ªnguez?
M.: Eso es totalmente incierto.
G.: Conoce a los mercenarios Hitier y Labade?
M.: No.
G.: ?Por qu¨¦ sonr¨ªe?
M.: Me est¨¢ usted haciendo unas preguntas que es como si me pregunta si he estado en la Luna ( ... )
G.: ?No ha tenido relaci¨®n con las actividades presuntamente il¨ªcitas de Amedo y Dom¨ªnguez en la constituci¨®n de los GAL?
M.: No.
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