"La naturaleza es sorprendentemente sencilla"

Sheldon Lee Glashow, de 59 a?os, recibi¨® el premio Nobel de F¨ªsica en 1979 por dar una de esas dif¨ªciles respuestas que permite comprender con reglas simples c¨®mo funciona la naturaleza. Su idea permiti¨® una explicaci¨®n tan buena que los f¨ªsicos tienen serias dificultades para seguir avanzando. Glashow, que hoy pronuncia una conferencia en el Museo de la Ciencia de Barcelona, intenta divulgar la investigaci¨®n avanzada y superar el abismo que, a su juicio, separa a cient¨ªficos y opini¨®n p¨²blica.

Glashow se dedica a uno de los campos m¨¢s abstractos de la ciencia: a investigar la composici¨®n y funcionamiento de las part¨ªculas m¨¢s peque?as que forman la materia y el origen del universo. Sin embargo, dice que para ¨¦l ciencia significa explicar la naturaleza, cosas como la diferencia entre los insectos y las personas o por qu¨¦ el cielo es azul. "La ciencia ha sido mi vida porque es la sistematizacion de la curiosidad", dice en su libro Interacciones. Sistematizando su curiosidad formul¨®, junto a su amigo de infancia Steven Weinberg y al pakistan¨ª Abdus Salam, una teor¨ªa que unificaba dos de las cuatro fuerzas que rigen el funcionamiento de la materia, demostrando que eran lo mismo. Por su descubrimiento recibieron el Premio Nobel. "Desde entonces", dice Glashow, "la gente me hace preguntas sobre filosof¨ªa a las que no s¨¦ contestar".

La explicaci¨®n resultante es tan buena que ha puesto las cosas muy dif¨ªciles a los f¨ªsicos que intentan avanzar m¨¢s. "El Modelo Est¨¢ndar, producto del trabajo de cientos de f¨ªsicos, engloba el comportamiento de los ¨¢tomos, lo que llamamos qu¨ªmica, el funcionamiento interior del ¨¢tomo, que llamamos f¨ªsica nuclear y el comportamiento de las part¨ªculas; es una s¨ªntesis en formulaci¨®n matem¨¢tica para entender los procesos de la naturaleza", explica Glashow.

Carambolas de billar

Seg¨²n ¨¦l, la sencillez de la teor¨ªa es un problema de la f¨ªsica actual: "Se necesitan grietas en que apoyar pies y manos para escalar una monta?a y en f¨ªsica necesitamos que algo vaya mal en una teor¨ªa para hacer otra mejor". Para ¨¦l, la ciencia no es s¨®lo "buscar la verdad", sino un placer, y pregunta de repente cu¨¢ntas carambolas hacen tres bolas de billar en una mesa sin bordes. "Si est¨¢n alineadas, har¨¢n tres carambolas, si no est¨¢n alineadas, creo que cuatro".

Es un f¨ªsico te¨®rico, pero insiste en la necesidad de la experimentaci¨®n para saber si se avanza por buen camino. "Einstein pensaba que se pod¨ªan contestar las preguntas que hacemos a la naturaleza s¨®lo pensando, pero parece que nadie ha tenido mucho ¨¦xito despu¨¦s de ¨¦l y por lo tanto necesitamos los costosos aceleradores de part¨ªculas, como el SSC [un gran anillo para hacer colisionar part¨ªculas y analizar su comportamiento cuya construcci¨®n en EE UU est¨¢ en debate] para investigar regiones de energ¨ªa en las que la naturaleza ha escondido sus trucos", dice.

Glashow, que estuvo en Espa?a por ¨²ltima vez hace 30 a?os, compagina sus clases de f¨ªsica en Harvard con la divulgaci¨®n cient¨ªfica, y para ello ha venido a Barcelona invitado por la Generalitat. Considera que ciencia, tecnolog¨ªa e historia est¨¢n muy relacionadas: "No son los reyes y las guerras lo m¨¢s importante en la historia, sino las personas que han aprendido a hacer cosas como cultivar campos o construir casa?. Para ¨¦l la vida de un rey es "irrelevante comparada con muchos descubrimientos cient¨ªficos" y recuerda a un f¨ªsico espa?ol, amigo y colaborador suyo: "Tengo mucho respeto por el rey Juan Carlos y por su papel en la democracia de este pa¨ªs, pero creo que ?lvaro de R¨²jula ser¨¢ m¨¢s importante en la Historia", bromea.