Comienza en Miami el juicio contra Noriega
El ex dictador paname?o Manuel Antonio Noriega se sentar¨¢ finalmente hoy en el banquillo ante un tribunal federal en Miami (en el Estado norteamericano de Florida) acusado de colaboraci¨®n con el cartel de Medell¨ªn en el transporte de toneladas de coca¨ªna a Estados Unidos. Los preparativos de la vista han durado casi dos a?os.
Un jurado de 12 titulares y seis suplentes fue seleccionado el viernes, tras seis d¨ªas de intenso escrutinio, para decidir el destino de Noriega al cabo de un proceso que puede durar de cuatro a seis meses. Las leyes de Estados Unidos establecen que todo acusado tiene el derecho de ser juzgado por un tribunal de "sus iguales", pero algunos cr¨ªticos del caso alegan que los 12 seleccionados no reflejan la composici¨®n multi¨¦tnica de Miami y, mucho menos, al ex l¨ªder paname?o.La mitad de la poblaci¨®n de Miami es hispana y el 20% de raza negra, pero el jurado titular ha quedado integrado por ocho negros, dos hispanos y dos blancos no latinos, elegidos entre 85 Finalistas. Nueve son mujeres. Los seis suplentes, que habr¨¢n de relevarlos ante cualquier contingencia, est¨¢n repartidos por igual en cuanto al sexo, y cuatro son negros y dos hispanos. El juez William Hoeveler, que presidir¨¢ la vista, les dijo que, una vez elegidos, pasaban a formar parte integral de un asunto muy importante y les pidi¨® repetidamente que eludieran cualquier contacto con la prensa con el objetivo de mantener su "mente abierta" y decidir s¨®lo a partir de las pruebas presentadas ante el tribunal.
Dos meses de alegato fiscal
El juicio comienza hoy con la intervenci¨®n del fiscal federal Michael Sullivan, quien presentar¨¢ el punto de vista del Gobierno norteamericano: Noriega garantiz¨® a los narcotraficantes inmunidad y protecci¨®n en Panam¨¢ a cambio de jugosas comisiones. La defensa, seg¨²n explic¨® el viernes el abogado Jon May, reservar¨¢ su argumentaci¨®n hasta que la acusaci¨®n concluya la presentaci¨®n del caso contra Noriega, que podr¨ªa durar dos meses, por estimar que tal intervenci¨®n de apertura podr¨ªa diluirse en la mente del jurado en ese espacio de tiempo.
El caso se presenta muy dificil para Noriega, cuya nada prometedora situaci¨®n se ha visto empeorada con la reciente suma del narcotraficante colombiano Carlos Lehder -que cumple desde hace a?os cadena perpetua en una prisi¨®n de m¨¢xima seguridad de Illinois- a la lista de los cerca de 80 testigos que presentar¨¢ el Gobierno. El diario neoyorquino Newsday inform¨® el viernes, citando fuentes an¨®nimas, que el Gobierno ofreci¨® a Lehder reducir su condena, trasladarlo a otro penal y traer a Estados Unidos a su familia bajo un programa de protecci¨®n de testigos, a cambio de la descripci¨®n en el juicio de las conexiones de Noriega con el cartel de Medell¨ªn.
El abogado Frank Rubino, director de la defensa de Noriega, ha replicado que el ex l¨ªder paname?o no conoce a Lehder y nunca se estuvo con ¨¦l.
Noriega podr¨ªa ser condenado hasta 140 a?os de c¨¢rcel y millones de d¨®lares de multa si es considerado culpable de las once acusaciones por las que comparece en Miami.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.