La econom¨ªa de Estados Unidos crece por primera vez despu¨¦s de nueve meses de recesi¨®n

La recesi¨®n econ¨®mica de Estados Unidos parece haber terminado, de momento, y despu¨¦s de un crecimiento negativo durante nueve meses. En el tercer trimestre, y seg¨²n cifras oficiales del Departamento de Comercio, se ha registrado un crecimiento del 2,4%. Tambi¨¦n se hizo p¨²blico ayer el d¨¦ficit presupuestario correspondiente al a?o fiscal qu¨¦ concluy¨® el 30 de septiembre y cifrado en 268.700 millones de d¨®lares (28,75 billones de pesetas).

Pese a ello, el presidente de la Reserva Federal -el Banco Central de EE UU-, el economista Alan Greenspan, hab¨ªa declarado el lunes que a pesar de las cifras de recuperaci¨®n de la econom¨ªa, EE UU estaba luchando por seguir adelante y peleando "contra fuertes vientos de cara". "La econom¨ªa se ha vuelto demostradamente estancada", dijo Greenspan, quien coment¨® que "a¨²n hay mucho que hacer". El contable de este macropa¨ªs a?adi¨® que personalmente ¨¦l no estaba "tranquilo".Las cifras indican que el producto nacional bruto estadounidense ha crecido un 2,4% y que la anterior referencia de crecimiento econ¨®mico tan alto hay que buscarla en el primer trimestre de 1989, cuando se registr¨® una subida del 3,6%.

Los economistas del Departamento de Trabajo creen que el aumento en los ¨ªndices de consumo ha sido determinante para terminar con las cifras de recesi¨®n. En el tercer trimestre del a?o, los norteamericanos gastaron 24.800 millones de d¨®lares (tinos 2,65 billones de pesetas). Una cifra importante si la comparamos con los gastos registrados en el trimestre anterior: 16.800 millones de d¨®lares (1,79 billones de pesetas).

Pese a las cifras, el temor de Greenspan es compartido por el propio presidente, George Bush, y los financieros de Wall Street y los dem¨¢s centros econ¨®micos del pa¨ªs. Bush declar¨® el. lunes, pensando ya que 1992 es un ano electoral, que hay que luchar contra la recesi¨®n con "u?as y dientes". Hace poco m¨¢s de dos semanas el presidente reconoci¨® que "no todo est¨¢ bien" en la econom¨ªa norteamericana. Su mea culpa se produjo poco despu¨¦s de que el Departamento de Trabajo anunciara el pasado d¨ªa 3 que el desempleo hab¨ªa descendido 0,1%.

Los economistas opinan que en estos momentos Bush deber¨ªa anunciar un recorte en los tipos de inter¨¦s para reavivar el mercado. Esa acci¨®n podr¨ªa dar un mayor impulso al crecimiento y aumentar el consumo. Si eso ocurriera las cifras de recuperaci¨®n podr¨ªan mantenerse durante este trimestre y penetrar en 1992 con optimismo.

La recesi¨®n se inici¨® a mediados de 1990. La econom¨ªa cay¨® durante tres trimestres consecutivos. En el periodo octubre, noviembre y diciembre de 1990, la cifra de ca¨ªda fue del 1,6%; del 2,8% en enero, febrero y marzo, y del 0,5% en abril, mayo y junio.

La recuperaci¨®n econ¨®mica del tercer trimestre ha sido d¨¦bil si se compara con las cifras de otras tasas de crecimiento registradas despu¨¦s de per¨ªodos de recesi¨®n. Esa es la raz¨®n por la que Greenspan fue claro cuando el lunes se di rigi¨® a un grupo de financieros de Rhode Island y les dijo que "la econom¨ªa se mueve hacia adelante, pero con vientos de cara de 50 millas por hora".

En el momento en que se registran estas cifras de crecimineto, las tasas del desempleo contin¨²an siendo altas. El crecimiento a¨²n no ha llegado a las contabilidades de las empresas que han tenido que reestructurar sus plantillas para hacer frente a la crisis. Pese a que el pasado mes de septiembre se crearon 24.000 nuevos puestos de trabajo, el paro a¨²n afecta a millones de norteamericanos.

Esta situaci¨®n se podr¨¢ superar tambi¨¦n cuando el Gobierno, con la excusa del crecimiento, pueda poner en marcha todos los programas que se ha visto obligado a cancelar.