Cresson traslada de Par¨ªs a Estrasburgo la Escuela Nacional de Administraci¨®n
El centralismo jacobino franc¨¦s recibi¨® ayer un duro golpe con el anuncio del traslado desde Par¨ªs a Estrasburgo de la Escuela Nacional de Administraci¨®n (ENA), la instituci¨®n que representa la c¨²spide del sistema educativo galo. Numerosos ministros, diputados, embajadores y altos funcionarios de la Rep¨²blica Francesa son enarcas, es decir, antiguos alumnos de esa escuela. La mudanza se inscribe en un plan de descentralizaci¨®n impulsado por la primera ministra Edith Cresson.
Desde el final de la II Guerra Mundial la ENA es el centro donde se forma la ¨¦lite del funcionariado franc¨¦s. En casi medio siglo de existencia tan s¨®lo unas 4.000 personas han tenido el privilegio de estudiar en el n¨²mero 13 de la parisiense Rue de I'Universit¨¦. Entre ellos, el ex presidente Valery Giscard d'Estaing, los ex primeros ministros Laurent Fabius y Jacques Chirac, los dirigentes socialistas Lionel Jospin y Jean-Pierre Ch¨¦v¨¦nement y los controvertidos pensadores Jacques Attali y Alain Minc.Creada con la idea de garantizar la homogeneidad de pensamiento y acci¨®n de prefectos, diplom¨¢ticos, inspectores de Hacienda y otros cuadros dirigentes de la rep¨²blica, la ENA ha conseguido tambi¨¦n anular las diferencias ideol¨®gicas y pol¨ªticas entre la izquierda y la derecha. Diez de los ministros del actual Gobierno socialista son antiguos alumnos de la escuela, pese a la confesada antipat¨ªa de Fran?ois Mitterrand y Edith Cresson por la denominada enarqu¨ªa.
El traslado de la escuela a Estrasburgo, dijo ayer Jack Lang, ministro de Cultura y portavoz del Gobierno, es "una decisi¨®n audaz" y tiene "un alto contenido simb¨®lico". De hecho, es el golpe m¨¢s duro recibido en mucho tiempo por la tradici¨®n jacobina francesa. La perspectiva de que la ¨¦lite del Estado se forme en otro lugar que Par¨ªs es un sacrilegio para los numerosos partidarios de un centralismo secular.
Pol¨¦mica
La Asociaci¨®n de Antiguos Alumnos expres¨® ayer mismo su "viva inquietud" por una medida de "consecuencias muy graves para el porvenir de la formaci¨®n de los cuadros superiores de la naci¨®n". Por el contrario, uno de los enarcas que se sientan en el Gobierno, Jean-Pierre Soisson, ministro de la Funci¨®n P¨²blica, se declar¨® "decididamente favorable" al traslado.Edith Cresson ha sido la principal responsable de la anunciada mudanza. La primera ministra mata as¨ª tres p¨¢jaros de un tiro: da un nuevo impulso a la descentralizaci¨®n, propina una patada en el trasero a la enarquia y ofrece a Estrasburgo un consuelo en caso de que la ciudad alsaciana sea derrotada en la batalla por la sede del Parlamento Europeo. Para acceder a la ENA hay que tener un t¨ªtulo universitario y superar un examen de entrada. Unas 1.200 personas lo intentan cada a?o, pero s¨®lo unas 140 son admitidas. Al t¨¦rmino de tres a?os de estudio -dos cursos te¨®ricos de seis meses cada uno y dos a?os de seminarios pr¨¢cticos dirigidos por altos funcionarios-, los elegidos se incorporan de modo autom¨¢tico a la Administraci¨®n p¨²blica francesa.
La elecci¨®n de Estrasburgo como sede de la escuela puede dificultar el car¨¢cter pr¨¢ctico de su ense?anza. El 70% de los encargados de los seminarios residen en Par¨ªs a causa de sus tareas en el aparato estatal.
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