El Ram¨®n y Cajal incumple las normas de seguridad en la manipulaci¨®n de tratamientos contra el c¨¢ncer

El personal de enfermer¨ªa del hospital Ram¨®n y Cajal manipula f¨¢rmacos de quimioterapia (medicamentos para el tratamiento del c¨¢ncer) sin que existan condiciones adecuadas para ello, seg¨²n un informe elaborado por el servicio de Medicina Preventiva del centro a finales del mes pasado. El manejo de estos productos debe realizarse, por su toxicidad, en las llamadas campanas de flujo laminar, unas cabinas de seguridad que han de ubicarse en habitaciones ventiladas. De las cuatro con que cuenta el hospital, s¨®lo una, la del servicio de Farmacia, cumple todos los requisitos.

Seg¨²n un documento del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabaj9, las personas que preparan o manipulan estos medicamentos (llamados citost¨¢ticos) est¨¢n expuestas a un riesgo cancer¨ªgeno o a alteraciones inmunol¨®gicas. La acci¨®n t¨®xica de los citost¨¢ticos se sufre a trav¨¦s de la inhalaci¨®n de part¨ªculas y por el contacto directo sobre la piel.Por esta raz¨®n, las normas internacionales insisten en la necesidad de preparar las inyecciones en una "cabina de flujo laminar", situada en una habitaci¨®n espec¨ªfica para ese uso, suficientemente ventilada y con salida al exterior. El personal debe utilizar bata, guantes y mascarilla.

Un an¨¢lisis de las cuatro cabinas del hospital Ram¨®n y Cajal practicado por el servicio de Medicina Preventiva dio los siguientes resultados: la campana existente en Medicina Interna es una simple campana extractora de humos, sin ning¨²n filtro, "que no deber¨ªa utilizarse en la preparaci¨®n de citost¨¢ticos bajo ning¨²n concepto, y que se utiliza". Esta campana, por tanto, no aisla del entorno las micropart¨ªculas potencialmente cancer¨ªgenas.

Las dos cabinas de los servicios de Virolog¨ªa y Urolog¨ªa, instaladas la pasada primavera, cuentan con filtro doble, pero est¨¢n conectadas al sistema general de aire acondicionado, adonde llega el 30% del aire filtrado.

"La ¨²nica cabina id¨®nea es la de Farmacia. Las de Virologia y Urolog¨ªa son ¨²tiles, pero no son del modelo espec¨ªfico para este tipo de preparados", explica un especialista que particip¨® en el estudio. "Los operarios est¨¢n protegidos, pero la salida del aire no se realiza al exterior. Ahora son nuevas y sus filtros funcionan bien, pero existe un riesgo potencial que afectar¨ªa a todo el hospital por su conexi¨®n con el sistema de aire acondicinado. No sabemos por qu¨¦ compraron este tipo de campanas, cuando existen otras m¨¢s id¨®neas".

Laboratorio central

A ra¨ªz de este informe, el comit¨¦ de Seguridad e Higiene del hospital decidi¨®, el pasado d¨ªa, 12, paralizar el uso de las cabinas y solicitar que la preparaci¨®n de estos medicamentos se centralice en un solo laboratorio, para minimizar los riesgos que entra?a esta tarea.

Los representantes de Comisiones Obreras (CC OO) en este comit¨¦ presentaron el pasado lunes una denuncia ante la Inspecci¨®n de Trabajo. Seg¨²n este sindicato, el problema del manejo de cistost¨¢ticos "viene de lejos". "Desde 1988 venimos pidiendo que estos medicamentos se preparen en un laboratorio con personal especializado", afirma Guillermina Perag¨®n, representante de CC OO. Seg¨²n el sindicato, la visita de un inspector de Trabajo en noviembre de 1990 llev¨® al hospital a buscar "una soluci¨®n parche": instalar dos campanas nuevas (las de Urolog¨ªa y Virolog¨ªa) para que el personal fuera all¨ª a hacer los preparados. El resultado no ha sido el esperado, ya que la presi¨®n asistencial hace que a menudo el personal de enfermer¨ªa no pueda abandonar su planta y prepare la medicaci¨®n "a pelo". Seg¨²n las fuentes consultadas, esta situaci¨®n es frecuente en el resto de la red hospitalaria.

Este peri¨®dico intent¨® ayer, sin ¨¦xito, obtener una versi¨®n de los directivos del hospital.