Eduardo Frei se perfila como candidato democristiano a la presidencia de Chile

El senador Eduardo Frei, de 49 a?os, fue elegido presidente del Partido Dem¨®crata Cristiano despu¨¦s de triunfar en los comicios internos con un 69% de los votos, frente al 31% que logr¨® su contendiente, el exsenador Narciso Irureta. La holgada victoria de Frei le deja como el mejor situado para ser designado candidato de su partido en la elecci¨®n presidencial de 1993, que decidir¨¢ el sucesor del actual jefe del Estado, el tambi¨¦n democristiano Patricio Aylwin.

Frei, que tiene el mismo nombre de su fallecido padre, Eduardo Frei, presidente de Chile entre 1964 y 1970 y carism¨¢tico l¨ªder de los democristianos, obtuvo 21.297 votos, un 60% de la votaci¨®n escrutada. Con ello obtuvo m¨¢s del doble de votos que Irureta, que reconoci¨® r¨¢pidamente su derrota en las primeras elecciones directas de presidente del mayor partido del pa¨ªs.El senador ser¨¢ acompa?ado en la directiva de su partido por el diputado Gutemberg Mart¨ªnez, como vicepresidente, y el licenciado en Ciencias Pol¨ªticas Genaro Arriagada, en la secretar¨ªa general. Frei, a quien todas las encuestas ubican en el primer lugar de las preferencias entre los posibles aspirantes presidenciales, reemplazar¨¢ en la direcci¨®n de su partido al senador Andr¨¦s Zald¨ªvar.

Ingeniero y con experiencia empresarial, Frei, que no es un hombre del aparato democristiano, planific¨® su triunfo con cuidado. Sab¨ªa lo que era ser vencido pese a la importancia que su apellido tiene dentro del partido. En las primarias que la Democracia Cristiana hizo en 1988 para la elecci¨®n presidencial durante el r¨¦gimen militar fue derrotado por Patricio Aylwin. Frei debi¨® candidatarse a senador por Santiago, logrando una c¨®moda primera mayor¨ªa nacional, mientras Aylwin se convert¨ªa en jefe del Estado. La clave del triunfo del senador fue lograr que el presidente democristiano resultara elegido en votaci¨®n directa de los militantes y no por el sistema indirecto de delegados, en que la maquinaria del partido cuenta con ventaja.

En la campa?a interna, las ¨²nicas diferencias entre los candidatos fueron de estilo y no de fondo. R¨¢pidamente, Frei consigui¨® el apoyo de otros dos candidatos, entre ellos Mart¨ªnez, considerado el m¨¢s cercano a Aylwin, integrando as¨ª en su lista a un gran sector de la maquinaria partidaria.

Por otra parte, el viernes el senador Ricardo N¨²?ez reemplaz¨® en la presidencia del Partido Socialista a Jorge Arrate, quien seguir¨¢ como vicepresidente, en un relevo decidido el a?o pasado. Arrate destac¨® como los principales logros de su gesti¨®n la unidad interna y que su partido sea la segunda fuerza del Gobierno.