L¨®pez de Osaba: "No hay discordia; a los hechos me remito"
J.C.Pregunta. Ha durado poco el pacto de no agresi¨®n entre las tres administraciones presentes en el Consorcio Madrid 92. ?Qu¨¦ le parecen las declaraciones del concejal de Cultura?
Respuesta. Todo lo contrario, el pacto ha funcionado perfectamente los dos ¨²ltimos a?os y sigue vigente. La prueba es que se ha aprobado toda la programaci¨®n sin ning¨²n voto en contra de todas las administraciones.
P. ?C¨®mo es posible que el alcalde mantenga una buena relaci¨®n con el Consorcio Madrid 92, que preside, y que su concejal no desaproveche la ocasi¨®n para descalificar la programaci¨®n?
R. Lo normal es que ocurra lo que est¨¢ sucediendo, que el alcalde, como presidente, tenga una excelente relaci¨®n con el consorcio. De lo dem¨¢s yo no opino.
P. ?Hay homenajes en la programaci¨®n oficial del Consorcio Madrid 92 a Felipe Gonz¨¢lez y los hermanos Guerra?
R. No. Desgraciadamente, es triste que se confunda en este pa¨ªs la genialidad de uno de los m¨¢s grandes m¨²sicos del siglo XIX y XX [Mahler] con afinidades y gustos personales.
P. ?Tiene noticias fidedignas de que el ministro de Cultura haya pedido la dimisi¨®n del concejal de Cultura o de que el alcalde piense destituirle?
R. A lo primero dir¨ªa que no. De lo segundo, no s¨¦.
P. ?Es Ortiz la ¨²nica manzana de la discordia para que triunfe la capitalidad cultural?
R. No hay discordias. A los hechos me remito.
P. ?Se ha dilapidado el dinero del consorcio en burocracia, publicidad o restauraciones de un palacio para uso propio?
R. Somos uno de los organismos que mejor podemos demostrar la austeridad y racionalizaci¨®n que tenemos con el dinero p¨²blico.
P. ?Hay discriminaci¨®n por parte del Gobierno central hacia Madrid con relaci¨®n a los eventos del 92?
R. Todo lo contrario.
P. ?La programaci¨®n est¨¢ dominada por el ministerio o dirigida desde el PSOE?
R. La programaci¨®n est¨¢ aprobada por unanimidad de todas las fuerzas pol¨ªticas.
P. ?El programa carece de impacto cultural?
R. ?Qui¨¦n dice eso y en qu¨¦ se basa? No podemos inventar otras fuentes de cultura distintas a las existentes. Otra cosa es que haya cr¨ªtica de cada uno de los actos realizados, lo cual es necesario y saludable.
P. ?Los actos anunciados para enero son pobres, un preludio de lo que llegar¨¢ o un exponente de lo que hay?
R. Por un lado, es una afirmaci¨®n del espa?ol y madrile?o, desde el estreno de El lun¨¢tico, en teatro, hasta la inauguraci¨®n oficial con la participaci¨®n de nuestras orquestas y los estrenos de nuestros m¨¢s importantes compositores; por otro, es el comienzo de una serie de tribunas de marcado tinte popular, cual es el jazz y el flamenco, sin oIvidar todo el programa barrio a barrio.
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