Nicanor Brice?o abandona el movimiento vecinal de Villaverde

Nicanor Brice?o, el hombre que moviliz¨® a miles de habitantes de Villaverde Bajo y Perales del R¨ªo para impedir la construcci¨®n de un poblado gitano en Los Molinos, ha decidido abandonar la coordinadora vecinal que ¨¦l mismo cre¨®. Su decisi¨®n se debe, seg¨²n asegura, "a la aparici¨®n de patrullas ciudadanas en la zona, cuyos m¨¦todos no comparto". Sin embargo, afirma que "estas patrullas ya no salen" y que los vecinos que las integran "no tienen nada que ver" con la coordinadora que ha decidido abandonar.

"Hasta ahora, Villaverde ha sido una pi?a, pero han aparecido las patrullas contra la droga, y yo no estoy de acuerdo con sus sistemas, as¨ª que prefiero irme para no tener el alma en vilo por lo que pueda suceder", explica Brice?o.El lunes, dos personas denunciaron en la comisar¨ªa de Usera que hab¨ªan sido golpeadas por una patrulla de 15 vecinos que buscaban toxic¨®manos en la estaci¨®n de Villaverde Bajo. Poco despu¨¦s, un hombre ingres¨® en estado grave en el hospital Doce de Octubre, trasladado desde la misma estaci¨®n de ferrocarril. Ante estos hechos, Nicanor Brice?o declar¨®: "Abandonar¨¦ la coordinadora de vecinos si persisten las acciones violentas".

Para Juan Manuel L¨®pez, representante de la Asamblea C¨ªvica de Villaverde, entidad que en repetidas ocasiones ha calificado de racistas las movilizaciones emprendidas por la coordinadora, "el movimiento se les ha escapado de las manos". "Han estado cuatro meses llamando a la venganza particular contra yonquis y camellos, y al final alguien ha captado el mensaje y ha iniciado las agresiones", a?ade.

En septiembre de 1991, Nicanor Brice?o era el desconocido presidente de una asociaci¨®n de vecinos, la de Perales del R¨ªo (Getafe). Dos meses despu¨¦s, el 8 de octubre, este hombre, empleado como conserje en un colegio p¨²blico, arengaba a 16.000 madrile?os que consigui¨® reunir en una manifestaci¨®n bajo el lema "No a la droga".

Su papel de l¨ªder lo adquiri¨® a fuerza de encabezar durante tres meses las movilizaciones de los vecinos de Villaverde Bajo y Perales del R¨ªo contra la construcci¨®n de un asentamiento para 80 familias gitanas chabolistas en la antigua escombrera de Los Molinos. En el poblado iban a ser realojadas 40 familias del n¨²cleo chabolista de Los Focos (Vic¨¢lvaro), a quienes los vecinos vinculan con el tr¨¢fico de drogas. "Bastante tenemos con el trapicheo que hay en los prefabricados de la Ribera de San Ferm¨ªn y en las chabolas del Rancho del Cordob¨¦s", argumentaban repetidamente.

Las protestas comenzaron el 13 de septiembre de 1991. Al d¨ªa siguiente, un grupo de encapuchados incendiaba una vivienda piloto que ya estaba construida en Los Molinos. Despu¨¦s tuvieron lugar seis manifestaciones, con una med¨ªa de 3.000 participantes.

El 3 de octubre, una semana despu¨¦s de la ruptura de las conversaciones iniciadas para buscar una soluci¨®n al conflicto, los vecinos tomaron el terreno destinado al poblado y paralizaron las obras. Durante casi dos meses permanecieron acampados impidiendo la construcci¨®n de las viviendas.

Brice?o y los vecinos por ¨¦l convocados ganaban la batalla el 28 de octubre: el presidente de la Comunidad, Joaqu¨ªn Leguina, promet¨ªa que ninguna familia de Los Focos ser¨ªa realojada en Los Molinos. El programa de erradicaci¨®n del chabolismo elaborado por el Consorcio para el Realojamiento de la Poblaci¨®n Marginada quedaba en jaque. Los vecinos de Villaverde abandonaban Los Molinos, y Brice?o iniciaba sus intervenciones en cada asamblea precedido por los gritos de "?torero, torero!".