Bien, pero menos

Michel Walker, australiano de origen pero de nacionalidad brit¨¢nica, ha escrito a casi todo el mundo con responsabilidades en el caso para denunciar su situaci¨®n. Al Defensor del Pueblo, a Comisiones Obreras, a la Comunidad Europea, al Ministerio de Educaci¨®n, al Consejo de Universidades. Trabaja en Murcia, cumple funciones de catedr¨¢tico, pero no lo es exactamente y ve¨ªa sus derechos disminuidos. Seguramente no ha sido s¨®lo su insistencia la que ha promovido la pr¨®xima modificaci¨®n de la ley para facilitar el acceso de ciudadanos de la CE a la funci¨®n p¨²blica, pero, desde luego, ha puesto su grano de arena.Walker se muestra satisfecho por el anuncio sobre la modificaci¨®n de la ley y comenta el asombro que habr¨ªa causado su situaci¨®n a catedr¨¢ticos que lo fueron en Oxford (Reino Unido).. Y cita a Josep Trueta -"que me ense?¨® traumatolog¨ªa", dice- y Salvador de Madariaga.

El problema no es s¨®lo espa?ol: Francia, B¨¦lgica y Grecia se hallan en situaci¨®n similar, mientras que Italia y Portugal han encontrado soluciones para el mismo. En Alemania y el Reino Unido, el acceso de extranjeros a la docencia es antiguo y nadie parece haberlo puesto en duda. Walker se pregunta cu¨¢l es el sentido de que un extranjero pueda ser concejal, pero no profesor universitario.

Organizaciones de enfermer¨ªa, sin embargo, no se muestran tan satisfechas. Sin poner en duda el derecho a la libre circulaci¨®n de trabajadores, Ernest Argilaga, secretario del Colegio de Diplomados en Enfermer¨ªa de Barcelona, y Luis Cabado, secretario general del Sindicato de Enfermer¨ªa de Catalu?a, muestran su preocupaci¨®n porque, afirman, "el nivel de preparaci¨®n de los profesionales de otros pa¨ªses de la CE es inferior al de Espa?a". Coinciden tambi¨¦n en que la medida no paliar¨¢ la insuficiencia de profesionales en el sector porque esta insuficiencia est¨¢ generalizada en Europa. Cabado cree que ser¨ªa necesario regular "al alza" la formaci¨®n en toda Europa.