La Asamblea toma medidas para evitar los insultos entre diputados

La Junta de Portavoces de la Asamblea de Madrid se reuni¨® ayer, durante casi tres horas y media y con car¨¢cter urgente, para intentar un pacto que parece imposible entre los grupos pol¨ªticos que forman parte de esta instituci¨®n: dejar de insultarse. El jueves de la semana pasada, diputados y portavoces del Partido Popular, del PSOE e IU, todos los partidos presentes en la C¨¢mara aut¨®noma, protagonizaron un pleno que, por su desarrollo y su conclusi¨®n, ha establecido un precedente considerado ahora por todos "grav¨ªsimo".Una propuesta para garantizar viviendas a los vecinos de una colonia destap¨® las iras contenidas desde hace semanas. La portavoz adjunta del PSOE, Dolores Garc¨ªa Hierro, prendi¨® fuego a la traca rescatando de la memoria del PP el pasado franquista de uno de sus ex diputados, Carlos Robles Piquer, cu?ado de Manuel Fraga. A partir de ah¨ª, en el sal¨®n y en los pasillos se escuch¨® de todo. Reaccionario, fascista, chorizo, golfo, nazi son algunos de los ep¨ªtetos registrados en el acta de sesiones y en las grabadoras de los periodistas.

El presidente de la C¨¢mara, Pedro D¨ªez, de IU, intent¨®, sin ¨¦xito, parar la avalancha que se le ven¨ªa encima. Al final, tras dos intervenciones anteriores, no concedi¨® el uso de la palabra al portavoz del PP, Alberto Ruiz Gallard¨®n, que, sin embargo, se la intent¨® tomar por su cuenta y riesgo conforme a un art¨ªculo del reglamento de la instituci¨®n.

La interpretaci¨®n de este art¨ªculo (el 68.1) se discuti¨® ayer varias horas. El PP entiende que un diputado puede hablar en un debate cuando lo solicite para pedir el cumplimiento del reglamento. El PSOE, IU y el presidente de la Asamblea no comparten este criterio. D¨ªez declar¨® ayer que, ante el tumulto formado en el pleno y por las atribuciones que le concede precisamente el reglamento de la C¨¢mara para conceder discrecionalmente la palabra, prefiri¨® no hacerlo.

Ni vencedores ni vencidos

Los partidos llegaron ayer al acuerdo, no escrito, de que los incidentes del pasado jueves no volver¨¢n a suceder. No hubo reprobaciones pese a que, con anterioridad, se hab¨ªan anunciado. Ruiz Gallard¨®n se consider¨® el vencedor moral del encuentro y asegur¨® estar convencido de que nunca m¨¢s se le limitar¨¢ en la Asamblea el uso de la palabra.Isabel Vilallonga, portavoz de IU, denomin¨® al portavoz del PP, entre otras cosas, "filibustero". Dolores Garc¨ªa Hierro, del PSOE, y Pedro D¨ªez prefirieron no cargar las tintas con m¨¢s calificativos. D¨ªez avis¨®: "La pr¨®xima vez har¨ªa lo mismo, y si se pasa a mayores echar¨¦ del pleno al diputado que se exceda".

Todos estos acuerdos, sin embargo, se hicieron al margen de los diputados de base. Mientras todo esto suced¨ªa en la planta alta, en la baja y en una Comisi¨®n de Transportes, parlamentarios del PSOE, IU y PP utilizaron palabras como "corrupci¨®n" o "estalinista" para insultarse.