"Pido consejo para ligar con un t¨ªo de clase que es un poco fr¨ªo"

La suciedad materializada en im¨¢genes y frases es tan frecuente en los lavabos de hombres como en los de mujeres. Ni el Museo del Prado se salva de las pintadas en los retretes, pero las facultades universitarias se llevan la palma.La de Periodismo en la Universidad Complutense puede servir de ejemplo. En un lavabo de chicas, en la tercera planta, se lee: "???Arriba Franco, arriba, m¨¢s arriba...!!! Y ahora dejadlo caer". Tuvo r¨¦plicas: "Joderos, rojos de mierda, que el cielo es azul y hac¨¦is todo con la derecha". Respuesta: "J¨®dete t¨² que hoy est¨¢ nublado y yo soy zurda". Contestaci¨®n: "Pero todos nuestros dedos tienen f¨¢lange". Contrarr¨¦plica: "S¨ª, pero para dar pu?etazos hay que cerrar el pu?o".

Tambi¨¦n se ven obscenidades -"me encantar¨ªa penetraros a todas, pero soy una t¨ªa"-, aunque ellas prefieren solicitar asesoramiento antes que insultar: "Pido consejo para ligar con un t¨ªo de clase que es un poco fr¨ªo. PD: es tan vulgar que s¨®lo le gustan las t¨ªas buenas". Enseguida vienen consejos nada complejos: "Pasa de ¨¦l". "Mu¨¦rete". Una alumna escribe: "Todos los profesores de la facultad est¨¢n locos, al menos los que me han tocado a m¨ª". Otra le pregunta: "?Por qu¨¦ te dejaste tocar?".

Nazis, frente atl¨¦tico, Sadam Husein y ETA son los temas pol¨ªticos m¨¢s tratados en el de los chicos. En el de las mujeres, s¨®lo uno es el que m¨¢s preocupa con diferencia: el aborto.

Algunas pintadas son reivindicaciones b¨¢sicas: "Quiero papel". Debajo: "Y yo". Hay verdaderos diarios donde alguien cuenta c¨®mo qued¨® con su novio la semana pasada y ¨¦ste se enfad¨® y se fue a la Vaguada, que es por donde vive, y no la llam¨® desde entonces. Las autoras al final preguntan: "?Qu¨¦ hago?".

"Lee dentro del cuadrado"

En el de los chicos: "Lee dentro del cuadrado", y en un cuadrado situado casi en lo alto de la puerta, en letra muy peque?a: "Que te cagas fuera". En otra puerta, una pintada roja y llamativa dice: "?Al loro con esto!", y marca una flecha hacia donde otro pint¨®: "Si am¨¢ramos m¨¢s a Dios esta puerta estar¨ªa limpia". M¨¢s abajo: "?Sabe tu madre lo que est¨¢s haciendo?". Respuesta: "Seguro que no, pero la tuya se acuerda de lo que hizo coninigo".

En otra puerta: "Pintadas mediocres de mediocres cerebros". Se referir¨ªa probablemente a las que estaban a su lado. "Busco un t¨ªo cachas y que no tenga plumas para que me pegue". Respuesta: "Cuando me cabreo estoy supercachas, as¨ª que si quieres quedamos". Al lado: "Soy extranjero, ?me pod¨¦is explicar lo que significa tener pluma?".