Bush env¨ªa 4.000 soldados a Los ?ngeles
El presidente de Estados Unidos, George Bush, mantuvo ayer dos reuniones estrat¨¦gicas para resolver la batalla urbana que se desarrolla en Los ?ngeles y otras ciudades norteamericanas a ra¨ªz de la sentencia en el caso de Rodney King: una militar, para aumentar el n¨²mero de fuerzas disuasorias, y otra racial, para calmar a la poblaci¨®n negra. Tras reunirse con sus principales asesores militares, Bush decidi¨® enviar 1.000 agentes federales, con miembros del cuerpo de ¨¦lite SWAP, a Los Angeles y movilizar a 4.000 soldados de infanter¨ªa para actuar en cualquier momento. Esta es la primera vez que se decide utilizar tropas federal en un conflicto interno norteamericano, desde los brotes de violencia racial de los a?os sesenta.
La Casa Blanca hizo hincapi¨¦ en que el presidente no ha declarado el estado de emergencia nacional y que no hizo sino responder a la petici¨®n de ayuda federal solicitada por el gobernador de California, Pete Wilson, el alcalde de Los Angeles, Tom Bradley. Bush, tras una reuni¨®n de dos horas con el jefe del Estado Mayor, el general Colin Powell; el fiscal general, William Barr; el secretario de Defensa, Donald Atwood, y el director del FBI, William Sessions, decidi¨® el env¨ªo de los polic¨ªas de ¨¦lite y las tropas.Los soldados del s¨¦ptimo regimiento de Ford Ord ser¨¢n trasladados de forma inmediata desde su acuartelamiento en Monterrey, cerca de San Francisco, a las inmediaciones de Los ?ngeles, cuyas calles patrullar¨¢n s¨®lo en caso de que la situaci¨®n sea incontrolable, seg¨²n el portavoz presidencial, Marlin Fitzwater. Esta unidad tiene experiencia en el control de las ciudades, pues patrull¨® en las calles de Ciudad de Panam¨¢ durante la invasi¨®n de 1989.
Enfriar el polvor¨ªn
Bush -que a las nueve de la noche (seis de la tarde en California, tres de la madrugada en Espa?a) iba a dirigirse a la naci¨®n por televisi¨®n desde la Casa Blanca- se reuni¨® luego con los principales l¨ªderes negros para pedirles que colaboraran en la resoluci¨®n del conflicto. El presidente quer¨ªa escuchar las propuestas de los representantes negros de las organizaciones civiles para enfriar el polvor¨ªn en que se est¨¢ convirtiendo el enfrentamiento entre blancos y negros.
Coretta Scott King, la viuda de Martin Luther King, que fue asesinado hace 24 a?os, y Benjamin Hooks, el presidente de la Asociaci¨®n Nacional para el Avance de la Gente de Color, fueron dos de los que acudieron a la Casa Blanca para escuchar y proponer soluciones al presidente de los Estados Unidos. Joseph Lowery, representante de la Conferencia Cristiana del Sur, declar¨® antes de entrevistarse con Bush que estaba preocupado por la falta de decisi¨®n que el presidente hab¨ªa demostrado desde que estallaron las protestas.
Las declaraciones que Bush ha realizado desde que los primeros brotes de violencia estallaron han ido endureci¨¦ndose progresivamente a medida que el conflicto sub¨ªa de tono, siguiendo la misma evoluci¨®n que el flujo de la opini¨®n p¨²blica.
El presidente de los Estados Unidos, que inicialmente se hab¨ªa declarado "frustrado" por el veredicto judicial, fue sustituyendo cualquier menci¨®n a la sentencia por una condena firme hacia las revueltas urbanas. "Debemos condenar la violencia y no debemos cuestionar la aplicaci¨®n de las leyes ni nuestra necesidad de guiarnos por ellas", asegur¨® Bush.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.