"El Rey es m¨¢s artista que yo"

Incontables condecoraciones espa?olas, extranjeras, y ahora conde de Latores y grande de Espa?a.Pregunta. ?Y a qu¨¦ aspira?

Respuesta. A mucho; no aspirar es signo de vejez.

P. ?Cas¨® con los Reyes?

R. Tanto como eso no; ser¨ªa un matrimonio morgan¨¢tico.

P. ?Cu¨¢ntas veces al d¨ªa ve al Rey?

R. Cuatro, cinco.... Varias.

P. ?Lo ha visto llorar?

R. Le he visto emocionarse.

P. ?Y aporrear la mesa?

R. Eso, varias veces.

P. ?Cu¨¢ntos secretos diarios archiva en su alma?

R. No demasiados.

P. ?Se bebe sidra natural de su Asturias natal aqu¨ª?

R. No, es uno de los fallos de La Zarzuela.

P. ?Le quit¨® el sue?o el t¨ªtulo nobiliario?

R. No, nada.

P. ?Por qu¨¦ dicen que fue repentina la decisi¨®n del Rey?

R. Por no estar enterados.

P. ?Es audaz con el Rey?

R. Como ¨¦l es audaz, tengo que serlo siempre.

P. ?Qu¨¦ tiene de singular?

R. Huir de la singularidad.

P. Ahora, ?le tiran los tejos las condesas?

R. A¨²n no lo he notado.

P. ?Puede decir algo de Alfonso Armada?

R. Siempre fuimos amigos y compa?eros, y eso no cambia.

P. ?Ve al Rey descorbatado en palacio?

R. S¨ª. Y con corbatas muy bonitas tambi¨¦n.

P. ?C¨®mo imagina a la pr¨®xima reina de Espa?a?

R. Ser¨ªa feliz si al Pr¨ªncipe le gustara quien a m¨ª me guste.

P. ?Le gusta ya alguna?

R. Muchas, pero no todas para reinas.

P. 0 s¨¦ase..., no suelta prenda.

R. No. Y es porque no tengo ni idea, ?sabe?

P. ?Confesor privado tiene?

R. No, ni aspiro a ello.

P. ?Y la familia real?

R. Aqu¨ª hay un capell¨¢n.

P. ?Cu¨¢nto le han ofrecido por sus memorias?

R. Almorzando con el Rey en un restaurante, me dijo un famoso editor, vecino de mesa: "Tienes un cheque en blanco". Y el Rey salt¨®: "Pero yo tengo parte".

P. ?Cu¨¢les son los tacos predilectos del Rey y su hijo?

R. Del Pr¨ªncipe no s¨¦. Y el Rey, los de cualquier espa?ol.

P. ?Quiso ser monja la infanta Elena?

R. Ni idea.

P. ?Es m¨¢s soldado usted o el Rey?

R. Por antig¨¹edad, yo; por empleo, ¨¦l.

P. ?Qu¨¦ tiene la infanta Cristina?

R. Un gran sentido del humor. Much¨ªsimo.

P. ?Le levanta usted la voz al Rey?

R. No, por Dios; y en todo caso, no lo digo.

P. ?C¨®mo se enfada usted?

R. Hacia dentro.

P. ?Es la mano derecha o la izquierda del Rey?

R. La derecha es la suya.

P. ?La Reina lee a Cela?.

R. Lee todo lo bueno que cae en sus manos.

P. A prop¨®sito, ?qu¨¦ t¨ªtulo le dar¨ªa usted al Nobel?

R. El que merece un gran escritor.

P. ?Se come mucho ajo en la familia real?

R. Yo no lo huelo...

P. ?Qu¨¦ ciencia es saber hablar sin mojarse?

R. La que pretendo ejercer ahora con usted.

P. ?Qui¨¦n es m¨¢s libertino en La Zarzuela?

R. Por favor, aqu¨ª somos todos muy pacatos....

P. ?Sabe el Rey Asturias, patria querida ... ?

R. Lo sabe y lo canta.

P. ?Le quedan recuerdos inconfesables del 23-F?

R. Me quedan secretos desconocidos para m¨ª.

P. ?Qu¨¦ palabra le dijo el Rey al final de aquellos acontecimientos?

R. Muchas gracias.

P. ?Escribe cartas de amor don Felipe?

R. Supongo que s¨ª.

P. ?Y usted?

R. Ya no.

P. Todo el mundo lo loa. Crit¨ªquese usted mismo, venga.

R. No, porque me pondr¨ªa verde y luego lo sentir¨ªa.

P. ?Es m¨¢s artista el Rey o usted?

R. Decididamente, el Rey.