De una a escaparate

El Guernica seguir¨¢ bajo la protecci¨®n de un vidrio de seguridad. El nuevo emplazamiento modifica tambi¨¦n la escenograf¨ªa y la visi¨®n del espectador. De la urna del Cas¨®n del Buen Retiro se pasar¨¢ al escaparate o la pecera del Museo Reina Sof¨ªa.El desaparecido arquitecto Jos¨¦ Mar¨ªa Garc¨ªa de Paredes proyect¨® un artefacto para exponer el Guernica a su llegada a Espa?a, en septiembre de 1981. El proyecto "de acondicionamiento de espacio arquitect¨®nico y museograf¨ªa", a base de estructura met¨¢lica, cristal y apoyos de piedra, jugaba con la geometr¨ªa en unos troncos de pir¨¢mide, aunque la forma m¨¢s aceptada y popular se identific¨® con la de una urna.

En el texto did¨¢ctico, de Alicia Quintana, que se vende en el Cas¨®n del Buen Retiro, se dice que el cuadro se expone "protegido, lo mismo que los dibujos, por una gran vitrina de cristal blindado que se dispuso para protegerlo ante el posible temor de un atentado pol¨ªtico". Una de las personas que vivi¨® de cerca el proceso de su traslado e instalaci¨®n, Javier Tusell, entonces director general de Bellas Artes, considera que no tiene sentido mantener la protecci¨®n. "Cuando se mont¨® con este cristal contra cat¨¢strofes se pens¨® que era temporal. Ahora, el cuadro no corre peligro y quitar el cristal ser¨ªa el gesto definitivo de reconciliaci¨®n".

El patronato del Museo Nacional Reina Sof¨ªa consider¨® que la protecci¨®n segu¨ªa siendo necesaria. El arquitecto Roberto Luna ha preparado un proyecto en donde se recupere la visi¨®n del cuadro a una distancia de unos tres metros y medio y a trav¨¦s de un vidrio especial, con un dise?o m¨¢s sencillo, alejado de la sacralizaci¨®n del Cas¨®n, en donde, como dec¨ªa ayer un visitante, "no se puede ver el cuadro con las manos en los bolsillos".