Barba Azul pudo ser inocente

La justicia francesa afrontar¨¢ hoy uno de los m¨¢s extra?os casos de su historia. Un jurado tendr¨¢ que decidir si el bar¨®n Gilles de Rais, ahorcado y quemado en 1440 como el autor del secuestro, violaci¨®n y asesinato de 150 ni?os, tiene derecho a una rehabilitaci¨®n p¨®stuma. Un escritor franc¨¦s ha batallado durante a?os para que se conceda una segunda oportunidad al personaje que inspir¨® al ogro Barba Azul del cuento de Perrault.

En la ma?ana del 26 de octubre de 1440, Gilles de Rais, uno de los se?ores feudales m¨¢s poderosos de Francia, mariscal de Francia y compa?ero de armas de Juana de Arco, fue ahorcado y quemado en una isla del r¨ªo Loira pr¨®xima a Nantes. Una inmensa muchedumbre asisti¨® a la ejecuci¨®n maldiciendo al hombre que hab¨ªa sido reconocido culpable de los delitos de brujer¨ªa, herej¨ªa, sodom¨ªa y asesinato. Gilles de Rais, seg¨²n la sentencia del tribunal, hab¨ªa secuestrado a 150 muchachitos para satisfacer sus apetitos sexuales. Luego, los hab¨ªa asesinado cruelmente.Hace de eso m¨¢s de cinco siglos, y desde entonces Gilles de Rais ha sido el protagonista de unos 200 libros. En el siglo XVII Perrault se inspir¨® en su personaje para crear Barba Azul, el ogro de las pesadillas infantiles. En nuestro siglo, Georges Bataille le consagr¨® un hermoso texto en el que dec¨ªa: "Lo que nos interesa en Gilles de Rais es la monstruosidad que el ser humano lleva en s¨ª desde su m¨¢s tierna infancia".

Y, sin embargo, el novelista franc¨¦s Gilbert Prouteau, que acaba de publicar Gilles de Rais o la cara del lobo, piensa que Barba Azul era inocente. Convencido de que Gilles de Rais fue v¨ªctima del "prinier proceso estalinista de la historia", Prouteau ha conseguido que hoy, s¨¢bado, se celebre en Nantes el que puede ser primer paso en la rehabilitaci¨®n del monstruo.

Un jurado compuesto por historiadores, juristas, psic¨®logos y un ex ministro de Justicia debe decidir si la demanda presentada por Prouteau es de recibo. Si deciden que lo es, el segundo proceso de Gilles de Rais se celebrar¨¢ el pr¨®ximo oto?o en el Palacio de Justicia de la vieja capital de los duques de Bretafia. En el momento de su ejecuci¨®n, Gilles de Rais ten¨ªa 36 a?os y era propietario de bienes, castillos y tierras equivalentes a tres de las actuales provincias francesas.

Amigo de Juana de Arco

Nombrado mariscal de Francia a la edad de 24 a?os, hab¨ªa participado al lado de Juana de Arco en la lucha contra los invasores ingleses. Cuando la Doncella de Orleans fue capturada, Gilles de Rais hizo todo lo posible por salvarla. El fracaso de su empresa le sumi¨® en una profunda depresi¨®n. Se retir¨® a uno de sus castillos.Gilles de Rais pas¨® los ultimos a?os de su vida rezando y bebiendo. Se zampaba, seg¨²n Prouteau, cinco litros diarios de un licor de 22 grados. Ello le convirti¨® en "un m¨ªstico et¨ªlico". Entretanto, multitud de ni?os desaparec¨ªan en las cercan¨ªas del castillo.

Esto ¨²ltimo, dice Proteau, no era tan raro en la ¨¦poca. En el siglo XV desaparec¨ªan anualmente en Francia entre 20.000 y 30.000 menores de edad. En cuanto al olor a carne quemada del castillo d¨¦ Gilles de Rais descrito por los testigos de su juicio, Prouteau piensa que el bar¨®n buscaba la piedra filosofal y usaba para ello preparados a base de animales.

La tesis de este abogado del diablo es que Gilles de Rais fue v¨ªctima de una conspiraci¨®n urdida por el duque de Breta?a, que quer¨ªa apropiarse de sus tierras y castillos. Un obispo fiel al duque reuni¨® las supuestas pruebas de pedofilia y asesinato. Sometido a la tortura, Gilles de Rais confes¨®. "Se le acusaba de haber matado a 150 ni?os", dice Prouteau, "y ¨¦l se declar¨® culpable nada menos que de 800 asesinatos". Un jurado compuesto por personas que le deb¨ªan dinero le conden¨® a muerte. As¨ª pas¨® a la historia.