EE UU y Sadam Husein

Como consecuencia de los nuevos hechos que ha hecho p¨²blicos Henry Gonz¨¢lez, presidente de la Comisi¨®n de Investigaci¨®n del Congreso de EE UU para Asuntos Bancarios, se habla ahora de nombrar un nuevo fiscal especial, esta vez dedicado a investigar cualquier delito relacionado con la pol¨ªtica de mimar a Irak que sigui¨® la Administraci¨®n de George Bush antes de la guerra del Golfo. ( ... )A juzgar por la lamentable actuaci¨®n de otros fiscales especiales, es f¨¢cil saber lo que va a ocurrir. Habr¨¢ unos cu¨¢ntos titulares moment¨¢neamente embarazosos para la Administraci¨®n de Bush; m¨¢s tarde, una vez terminadas las elecciones, todo el asunto ser¨¢ olvidado. Posteriormente, suponiendo que Bush sea reelegido y que los dem¨®cratas sigan siendo mayor¨ªa en el Congreso, la investigaci¨®n se convertir¨¢ en un arma ¨²til para vapulear al Ejecutivo. No importa cu¨¢les sean los indicios de complicidad por parte del Congreso -abundantes, seg¨²n sospechamos-: ser¨¢n ignorados. ( ... ) Y nada de todo esto entrar¨¢ en el fondo de la cuesti¨®n: ?c¨®mo dio EE UU en la monumental estupidez de rearmar a Sadam Husein? ?Habr¨¢ aprendido la lecci¨®n, o volver¨¢ a caer en lo mismo con el pr¨®ximo pirata, como la Siria de Assad, por ejemplo?

El problema es que las instituciones estadounidenses han ido perdiendo continuamente su capacidad para abordar con seriedad problemas serios.

13 de julio