Tres heridos graves en una explosi¨®n de gas en Carabanchel
Tres trabajadores sufrieron ayer heridas graves y dos centenares de personas pasaron parte de la noche al raso por culpa de una explosi¨®n de gas. El suceso se origin¨® en una zanja donde los operarlos, contratados por Gas Natural, instalaban unas nuevas tuber¨ªas. El accidente ocurri¨® a las 2.20 en el n¨²mero 128 de la calle del General Ricardos (Carabanchel). Los heridos son Juan Antonio Garc¨ªa Moreno, Miguel ?ngel Fern¨¢ndez L¨®pez, ambos de 27 a?os, y Ricardo Lozano Mart¨ªnez, de 36.
Los tres heridos permanec¨ªan ingresados ayer en la unidad de quemados del hospital Universitario de Getafe. Garc¨ªa y Fern¨¢ndez sufren quemaduras de segundo grado que afectan al 40% y al 32%, respectivamente, de su cuerpo. Su pron¨®stico es grave. Los dos resultaron con heridas en miembros superiores, t¨®rax, espalda y cara.Lozano permanece hospitalizado, en estado menos grave, con quemaduras que afectan al 14% de la superficie corporal. Las de la cara son m¨¢s superficiales que las de los brazos. Fuentes hospitalarias aseguraron que, salvo complicaciones, se prev¨¦ una evoluci¨®n positiva de los tres heridos.
La explosi¨®n fue ocasionada por una fuga de gas en una conducci¨®n de 250 mil¨ªmetros. El escape se debi¨® al fallo de uno de los obturadores de caucho que se colocan en las tuber¨ªas durante, las obras, seg¨²n explicaron portavoces de Gas Natural.
Material desconocido
Se desconoce todav¨ªa cu¨¢l fue el material inflamable que, al entrar en contacto con el gas, produjo el estallido. En el momento del accidente trabajaban en la zanja seis operarlos.Los vecinos de las 70 viviendas prefabricadas de Blasa P¨¦rez y los del n¨²mero 128 de General Ricardos fueron desalojados de sus domicilios hasta que, a las 4.45, concluyeron las labores de extinci¨®n. Unos abandonaron sus casas en pijama, otros descalzos y algunos sin haber tenido tiempo de colocarse la dentadura postiza.
El relato de los hechos, es siempre el mismo. "O¨ªrnos una explosi¨®n y gritos pidiendo ayuda, vimos una llamarada enorme y pronto llegaron los bomberos, que nos hicieron abandonar nuestras casas", explican uno de ellos.
En bata
Mar¨ªa S¨¢nchez Seco, una anciana de 77 a?os que padece: de una fuerte artritis, tuvo que dejar su casa sin la faja ortop¨¦dica que necesita para moverse Vive a menos de tres metros del lugar de la explosi¨®n."O¨ª el ruido, pero como me cuesta mucho levantarme segu¨ª en la cama", explica. "?Mari, Mari, afuera, que hay fuego!, me dec¨ªan, y yo tuve que salir con una triste batita: ?menudo fr¨ªo pas¨¦!". "El susto fue morrocotudo", concluye.
Varias puertas m¨¢s all¨¢ otras dos vecinas comentan el incidente mientras preparan un cocido. Ambas son pensionistas, como la mayor parte de los habitantes de los sankis (prefabricados) de Blasa P¨¦rez. En octubre fueron desalojados del antiguo Poblado de Absorci¨®n de General Ricardos y est¨¢n pendientes de la adjudicaci¨®n de nuevas viviendas. "Yo estaba nerviosita perdida, s¨®lo acertaba a decir: Virgen del Carmen, que no se prendan los barracones", relata una de ellas.
Leonor Rodr¨ªguez, de 65 a?os, vio las llamas debajo de su casa, el primer piso del portal 128 de General Ricardos. "Cuando o¨ª el ruido pens¨¦ en una bomba", asegura. "Yo no quer¨ªa m¨¢s que salir a la calle y le met¨ªa prisa a mi hija, que se lo tomaba con m¨¢s calma", explica. Los heridos fueron trasladados en coches particulares al hospital militar G¨®mez Ulla, cercano al lugar de la explosi¨®n, donde les hicieron las primeras curas de urgencia. A las 5.30 ingresaron en el Universitario.
Los hospital de Getafe y La Paz son los dos ¨²nicos de la regi¨®n que cuentan con unidades especiales para la asistencia de grandes quemados.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.