Los mitos caribe?os del pintor cubano Wifredo Lam llegan al Reina Sof¨ªa
La exposici¨®n retrospectiva presenta 78 obras realizadas entre 1930 y 1970
Wifredo Lam ha vuelto a Espa?a y en las salas del Reina Sof¨ªa se ha reunido con su amigo Picasso. Con esta met¨¢fora y tono emocionado, Gerardo Mosquera, cubano y cr¨ªtico de arte, present¨® ayer la exposici¨®n retrospectiva de su compatriota. La muestra se inaugura hoy al p¨²blico y permanecer¨¢ abierta hasta el 14 de diciembre Despu¨¦s ir¨¢ a la Fundaci¨®n Joan Mir¨® de Barcelona -de enero a marzo de 1993- y posteriormente podr¨¢ verse en M¨¦xico.
Las 78 obras colgadas pertenecen al periodo que va desde 1930 a 1970 y han sido seleccionadas con el asesoramiento de la viuda del artista, Lou-Laurin Lam, que estuvo en la presentaci¨®n a la prensa. "Estoy verdaderamente contenta de ver la gran calidad que tiene esta exposici¨®n, quiz¨¢ la mejor y m¨¢s completa que se ha hecho nunca de mi marido. Hay aqu¨ª cuadros muy poco conocidos, aut¨¦nticas primicias", dijo. A?adi¨® que los 15 a?os que Lam pas¨® en Espa?a fueron fundamentales en su formaci¨®n, tanto humana como art¨ªstica, y que "se fue de Espa?a en 1938 y qued¨® para siempre marcado por la guerra espa?ola, que ¨¦l vivi¨® del lado republicano, y por su amistad con Picasso".Adem¨¢s de su viuda han acompa?ado la obra de Lam hasta el Madrid en que vivi¨® desde los 21 hasta los 35 a?os el investigador cubano Ram¨®n V¨¢zquez, el cr¨ªtico Gerardo Mosquera y la directora del Museo Nacional de La Habana, Lucy Villegas. "La estatura de Lam y el prestigio de las instituciones que nos las han solicitado nos han llevado a realizar una selecci¨®n muy estudiada entre las m¨¢s de 200 obras que tenemos en la colecci¨®n del museo de La Habana", dijo Lucy Villegas. Para Villegas, "Lam es un gran nombre de la pintura contempor¨¢nea. Fruto de la mezcla de razas y culturas, lugar de recurrencia para la consideraci¨®n de los v¨ªnculos existentes entre los seres humanos, tan semejantes entre s¨ª pese a las diferentes apariencias. Tan igualados por la capacidad netamente humana de hacer arte".
Amigo de Picasso
El cr¨ªtico de arte Gerardo Mosquera destac¨®, como algo casi simb¨®lico, el que la obra de Lam se exhiba bajo el mismo techo que el Guernica, de Picasso. "No parece una casualidad el hecho de que se encuentren, a trav¨¦s de sus obras, los que fueron en vida grandes amigos. Y que el encuentro se realice precisamente a trav¨¦s del cuadro que simboliza aquellas ideas pol¨ªticas en las que coincidieron ambos".En las p¨¢ginas del cat¨¢logo editado para la ocasi¨®n hace Mosquera un interesante estudio de la relaci¨®n entre Picasso y Lam; una relaci¨®n que, si hubiera que creer al pie de la letra al propio Picasso, habr¨ªa que considerar inevitable. "Incluso si no hubieras venido con la carta de Manolo en el bolsillo te hubiera visto por la calle y habr¨ªa pensado: quiero ser amigo de ese hombre, le dijo Picasso cuando, a trav¨¦s del escultor Manolo Hugu¨¦, los dos artistas se encuentran en Par¨ªs por primera vez. Algo de esto se percibe el ver la exposici¨®n. Las semejanzas en la mirada, los temas y sus tratamientos. Picasso, no cabe duda, est¨¢ presente en la obra del cubano. Lo que Lam quer¨ªa encontrar y encontr¨® en Europa era, justamente, el aire de los tiempos. Lo encontr¨®, por supuesto. Lo que m¨¢s le gustaba de Picasso era, en sus propias palabras, "la presencia del arte y del esp¨ªritu africano que descubro en ella". Y cuando volvi¨® a Cuba, en 1941, dejando detr¨¢s de s¨ª muchos amigos y una experiencia que le marcar¨ªa para siempre, comienza a trabajar lo que ser¨ªa, en opini¨®n com¨²n, lo mejor de su obra. La naturaleza feroz, las plantas tropicales, la cultura negra, sus propias ra¨ªces que le explotan en el cuerpo, todo ello excita su imaginaci¨®n y su esp¨ªritu. Mira a su alrededor y reconoce, ahora s¨ª, que es all¨ª donde tiene que crear. A finales de 1942 comienza su c¨¦lebre cuadro La jungla. Por esa ¨¦poca est¨¢ trabajando el gran formato y en ¨¦l permanecer¨¢ durante los 30 a?os que siguieron.
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