Jaime Ch¨¢varri cumple 30 a?os en el cine con una historia de amor alegre

En 1962, Jaime Ch¨¢varri cogi¨® su primera c¨¢mara de ocho mil¨ªmetros y comenz¨® su carrera cinematogr¨¢fica. Desde entonces ha dirigido nueve pel¨ªculas. La d¨¦cima cuenta una historia de amor y para su rodaje ha convertido la madrile?a plaza de la Paja en plat¨® de cine. All¨ª, rodeado de su equipo, Ch¨¢varri, de 49 a?os, rueda Tierno verano de lujuria y azoteas, "una pel¨ªcula sobre la alegr¨ªa del amor y del placer", seg¨²n la actriz Marisa Paredes, que con Gabino Diego e Imanol Arias encabeza el reparto.

La pel¨ªcula, aunque se rueda en oto?o, transcurre en pleno verano. Unos ca?ones de luz enormes dan calor a los int¨¦rpretes y a los extras, que luchan como pueden, sobre todo con caf¨¦, contra el fr¨ªo y la humedad. El rodaje tiene como espectadores de primera fila a los estudiantes del instituto Santa B¨¢rbara, cuyos ventanales dan a la plaza de la Paja. Ellos y el resto de los habitantes de este castizo lugar madrile?o parecen parte del equipo de rodaje, y as¨ª, dos extras que hacen de camellos se confunden con dos camellos aut¨¦nticos que, tranquilamente sentados en un banco, contemplan el ajetreo del rodaje.El filme -basado en la novela de Pablo Soloz¨¢bal La ¨²ltima palabra- tiene, seg¨²n la productora, un presupuesto de 250 millones de pesetas y est¨¢ previsto que termine de rodarse el pr¨®ximo 20 de noviembre Gabino Diego es Pablo, un nieto de exiliados que ha vivido en Rusia durante su adolescencia y que ahora vuelve a Espa?a, donde s¨®lo conoce a su prima Olga (Marisa Paredes), una reconocida actriz 15 a?o mayor. que ¨¦l, de la que se enamora locamente y a la que logra conquistar con el relato de sus maravillosos cuentos er¨®ticos.

"Olga soy yo", sentencia Marisa Paredes, "es la ¨²nica condici¨®n que le puse al director". La actriz, m¨¢s guapa que nunca con la cara lavada, est¨¢ sentada junto a sus compa?eros de reparto. Imanol Arias interpreta a su compa?ero sentimental. "El hombre que la sujeta", aclara la actriz.

"Soy el tipo que resignado ve c¨®mo su mujer se enamora de este tipejo", dice el actor se?alando a su rival, Gabino Diego, que r¨¢pidamente se defiende: "Pero el que al final se queda solo soy yo". "S¨ª, pero yo me quedo con la chica sin tenerla", contin¨²a Arias, a quien Diego -que no se resigna- repite: "?Ya, pero yo me quedo solo!". Los oponentes son interrumpidos por Marisa Paredes, que con aire maternal le dice a Gabino Diego. "T¨² eres un donju¨¢n que va de flor en flor. Yo siempre te querr¨¦, y, qui¨¦n sabe, a lo mejor alg¨²n d¨ªa estaremos definitivamente juntos. Pero ahora es mejor as¨ª".

"Gabino interpreta a un joven que no tiene nada que ver con los j¨®venes de ahora", explica Ch¨¢varri, que realiz¨® su ¨²ltima pel¨ªcula, Las cosas del querer, hace tres a?os y que en 1982 dirigi¨® a Gabino Diego en Las bicicletas son para el verano, cuando el actor s¨®lo ten¨ªa 16 a?os. "?l no es un seductor, es un loco. Un solitario enamoradizo", a?ade el director, que compara al personaje con el de un joven Cyrano. Algo que algunas alumnas del instituto Santa B¨¢rbara, que contemplan d¨ªa a d¨ªa el rodaje discuten violentamente: "?Gabino Diego feo? ?Pero si es guap¨ªsimo!".