Plataformas litorales

En vista de la exposici¨®n de sus obras m¨¢s recientes me atrever¨ªa sin ninguna duda a considerar el trabajo de Ram¨®n Roig (Oropesa de Mar, 1963) como una de las propuestas pict¨®ricas m¨¢s interesantes, intensas y personales de las surgidas en los ¨²ltimos a?os en la escena catalana. Junto a unos pocos m¨¢s, est¨¢ llamado a ser un referente inolvidable por cuanto se refiere a su frescura gestual, su atrevimiento formal y la solidez conceptual que anida en toda su obra.Una vez m¨¢s, la pintura de Ram¨®n Roig, esplendorosa, deslumbrante y magnificente como nunca en los grandes formatos y en esos usos tan atrevidos del color y del vocabulario figural, sorprende de nuevo por la recurrencia a unos repertorios tem¨¢ticos e iconogr¨¢ficos de lo m¨¢s insospechado, as¨ª como por la capacidad de establecer una base conceptual suficientemente trabajada y reflexionada como para defenderse con soltura ante la eterna disyuntiva que diferencia el automatismo gestual de la reflexi¨®n premeditada que siempre ha caracterizado a su obra.

Zona mar¨ªtima

Para esta exposici¨®n, trabajada de una forma compacta y unitaria, el artista ha partido de algunos elementos que delatan la zona mar¨ªtima en la cual ha vivido tantos a?os y que le otorgan su singularizaci¨®n. La idea de los observatorios, las plataformas litorales que se adentran en el mar o la vida microsc¨®pica puesta al descubierto y tratada como alma especular son elementos que constituyen casi parte de su propia vida, toda vez que suponen un vast¨ªsimo e impresionante recurso metaf¨®rico.Las variadas "percepciones del bi¨®logo insurrecto" construyen un universo po¨¦tico propio en el que la sistematizaci¨®n del lenguaje da paso a la observaci¨®n y, en suma, al establecimiento de un proyecto est¨¦tico profundamente imbricado con los avatares de la propia experiencia: tanto en las grandes telas de fondos marinos o de colores imposibles llenos de presencias mitad org¨¢nicas mitad gestuales como en esa peque?a intervenci¨®n tridimensional que presenta la condensaci¨®n de todo su universo, la obra de Ram¨®n Roig constituye hoy por hoy una de las aventuras est¨¦ticas m¨¢s fascinantes, m¨¢s poli¨¦dricas y m¨¢s hechizadamente cautivadoras de las que componen el campo de la ex experimentaci¨®n pict¨®rica.