A mi padre
Mi padre ha muerto ("oh, pobrecilla", pensar¨¢n muchos). Ha sido una m¨¢s de las muchas v¨ªctimas del s¨ªndrome t¨®xico ("?pero todav¨ªa con ¨¦sas! ?Vaya modo de dar la lata! Que cojan el dinero y se callen" pensar¨¢n otros m¨¢s). S¨ª. Mi padre ha venido a engrosar la ya larga lista de muertes que dejaron de ser noticia hace 10 a?os. A?os que toda mi familia (entre an¨®nimos, rechazos y dolores f¨ªsicos y morales) ha pasado en medio de mucha incomprensi¨®n e indiferencia, como miles de familias m¨¢s. No soy justa; he de recordar a tantos que nos han apoyado. Aunque no a un Gobierno que se desentiende de los que hace 10 a?os le ayudaron a llegar a gobernar.Hubo gente que nos mir¨® como apestados. Eso no dol¨ªa. Se comprende. La indiferencia duele m¨¢s. Y algo tan incomprensible como la envidia, desarma (?envidia!), s¨ª. Porque creen que vivimos del cuento, que ganamos millones a costa de la enfermedad, que... No necesito defenderme; mi conciencia est¨¢ tranquila. Vivimos del trabajo, que tanto nos cuesta conseguir y mantener. Tuve suerte; mis lesiones no son graves, las venc¨ª, pude estudiar y ejerzo cuando me dejan. Los hay que ni pueden comer solos. Los hay que ya no est¨¢n. Mi padre... Mi padre luch¨® por todos nosotros. No excesivamente culto, no excesivamente pol¨ªtico, un empleado, "un hombre". ?l luch¨® por los enfermos y contra la enfermedad. Durante todos estos a?os fue venci¨¦ndola batalla tras batalla. Sus soldados, m¨¦dicos an¨®nimos, sab¨ªan luchar... hasta hace unos d¨ªas. Pero no puede conmigo, ni con mi familia, ni con 24.000 m¨¢s. No pedimos dinero. S¨®lo solidaridad e investigaciones serias.
Gracias a todos los hospitales que ayudaron a mi padre, y a la UCI de La Paz y sus m¨¦dicos, personas, humanos, m¨¦dJIcos. ?Qu¨¦ poco se puede decir en.30 l¨ªneas!-
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.