Mayerling, un siglo despu¨¦s
Nuevas pistas sobre la muerte de Rodolfo de Austria y su amante en el pabell¨®n de caza en 1889
El 30 de enero de 1889, un pr¨ªncipe austriaco que sab¨ªa que nunca ser¨ªa emperador y su amante adolescente aparecieron muertos en el pabell¨®n de caza de Mayerling, a las afueras de Viena. Ahora, m¨¢s de un siglo despu¨¦s, la historiadora Brigitte Haumann asegura haber encontrado una pista que arrojar¨¢ nueva luz sobre el misterio de Mayerling.Haumann ha hecho p¨²blica la existencia de un cofre que contiene un rev¨®lver que supuestamente perteneci¨® al archiduque Rodolfo. El cofre fue enviado hace unos 10 a?os al octogenario duque Otto de Habsburgo, hijo del ¨²ltimo emperador de Austria. Junto al rev¨®lver se hallaban unas cartas de despedida, mecho nes de cabello de los dos amantes y un pa?uelo. El cofre ha permanecido durante a?os en poder de los descendientes de un alto funcionario austr¨ªaco que emigr¨® a Estados Unidos en los a?os treinta.
Pero no es ¨¦sta la ¨²nica novedad que se ha producido estos d¨ªas sobre la muerte de Rodolfo,y Mar¨ªa Vetsera. El martes pasado, un comerciante de muebles de Linz reconoci¨® haber sido el autor de la profanaci¨®n de la supuesta tumba de Mar¨ªa Velsera en el cementerio vien¨¦s de Heigelkreuz en julio de 1.991.
El comerciante, Helmut Faltzesteiner, condujo a la polic¨ªa a un almac¨¦n en Viena, donde hallaron un f¨¦retro que conten¨ªa los restos de una joven de unos 18 a?os muerta hace m¨¢s de un siglo. Los restos han sido enviados a un laboratorio para establecer si se trata de la baronesa Vetsera y, en caso afirmativo, establecer las causas del fallecimiento. Pese al tiempo transcurrido desde la tragedia del pabell¨®n de caza y a los r¨ªos de tinta y celuloide vertidos sobre el suceso -cinco pel¨ªculas entre 1935 y 1968-, nunca se ha realizado una investigaci¨®n cient¨ªfica sobre el hecho.
Seg¨²n el comunicado oficial de la casa imperial, el archiduque Rodolfo, ¨²nico hijo var¨®n del emperador Francisco Jos¨¦ y su esposa Isabel (la desdichada Sissi, elevada a la categor¨ªa de mito del cine rosa en la piel de la no menos desgraciada Romy Scl¨ªneider), dispar¨® un fusil de caza sobre la baronesa h¨²ngara Mar¨ªa Vetsera, de 17 a?os, que habr¨ªa aceptado seguir a su amante en un pacto ¨²ltimo de pasi¨®n y muerte. La tesis oficial nunca fue aceptada por los adversarios pol¨ªticos del emperador y los escritores rom¨¢nticos aprovecharon la circunstancia para convertir a los dos amantes en figuras de novela.
Nadie sabe lo que pas¨® en Mayerling la noche del 30 de enero de 1889. Las hip¨®tesis m¨¢s fant¨¢sticas han llegado a proponer un envenenamiento urdido por los francmasones, o un desesperado suicidio de Rodolfo tras la muerte de Mar¨ªa debido a un aborto fallido. Las opiniones m¨¢s l¨®gicas apuntan a que el archiduque Rodolfo, a quien su padre hab¨ªa apartado de las tareas de gobierno por sus flirteos con la oposici¨®n h¨²ngara y su participaci¨®n en una conspiraci¨®n para resucitar el reino de Polonia, tuvo miedo de que sus veleidades pol¨ªticas salieran a la luz y oblig¨® la jovenc¨ªsima Mar¨ªa a acompa?arle en el ¨²ltimo viaje.
A la muerte de Rodolfo fue designado heredero del trono su primo el archiduque Francisco Fernando. Tampoco ¨¦l ser¨ªa emperador: su asesinato en Sarajevo en 1914 fue la llama que prendi¨® la mecha de la Primera Guerra Mundial.
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