Susana vuelve a respirar
La afectada por el 's¨ªndrome Ardystil' que recibi¨® un pulm¨®n se recupera en Francia
Al despertar, Susana Javaloyes no se acordaba de nada. Los tubos, las incomprensibles m¨¢quinas que se. introduc¨ªan en su cuerpo y el parpadear de los contadores la hicieron sentirse en otro mundo.Aislada en una sala de esterilizaci¨®n, la primera voz familiar -la de sus padres- le lleg¨® por tel¨¦fono. Entonces la joven alcoyana supo de nuevo que era domingo, que se encontraba en el prestigioso hospital Xavier Arnozan de Burdeos (Francia) y que hab¨ªa sido sometida a un doble trasplante de pulm¨®n. El ¨²ltimo remedio para el denominado s¨ªndrome Ardystil: una extra?a enfermedad, nunca vista en los manuales cient¨ªficos, que trae de cabeza a expertos de todo el mundo. Y no sin raz¨®n.
A los nueve meses de su detecci¨®n, en las comarcas alicantinas de L'Alcoi¨¤ El Cointat, los m¨¦dicos todav¨ªa no han logrado dar con su agente causal ni con un tratamiento que sea capaz de frenar los s¨²bitos empeoramientos que provoca. Entretanto, seis personas han muerto y otras 68 est¨¢n afectadas por este mal.
"Est¨¢ mucho m¨¢s animada que antes de la operaci¨®n", coment¨® ayer desde el hospital franc¨¦s Francisco Javaloyes, padre de Susana. Le acompa?aba Pilar, su mujer. Se comunican con su hija mediante un tel¨¦fono interno. "Los m¨¦dicos prefieren que hasta dentro de una semana no entremos en la habitaci¨®n para evitar contagios", se?al¨® Francisco, que trabaja de tejedor textil y que prefiere no hacer comentarios sobre los "culpables" de la situaci¨®n de su hija. La intervenci¨®n, efectuada en la madrugada del 10 de enero, fue considerada t¨¦cnicamente un ¨¦xito. Susana, de 21 a?os, es la primera afectada por el s¨ªndrome Ardystil que recibe un trasplante. La operaci¨®n fue realizada. por un equipo m¨¦dico franc¨¦s, dirigido por el doctor Louis Couraud, y con la presencia de un especialista del hospital La Fe de Valencia. El pulm¨®n proced¨ªa de una mujer francesa de 35 a?os.
Fue el final de un largo proceso, que se inici¨®, como recuerda su padre, en diciembre de 1991, cuando Susana, con la intenci¨®n de ahorrar para un coche, entr¨®, aconsejada por las amigas, en la f¨¢brica de estampaci¨®n por aerografiado Ardystil, situada en el vecino pueblo. de Cocentaina (Alicante). All¨ª conoci¨® y trabaj¨® con las fallecidas Yovanna, Soraya, Isabel, Pepa y Mila. Ella era una de las encargadas de pintar con pistola las telas.
Cuatro meses de duro trabajo en condiciones tercermundistas, ante la vista gorda de la Administraci¨®n -el Ministerio de Trabajo inspeccion¨® al menos dos veces el local sin denunciar sus p¨¦simas condiciones sanitarias-, bastaron para que sus pulmones quedasen da?ados. Irremediablemente da?ados. Las investigaciones sanitarias indican que el mal -que afecta a los pulmones y que en su fase terminal presenta un cuadro similar a la fibrosis pulmonarse debi¨® a la inhalaci¨®n de los productos t¨®xicos empleados durante el proceso de aerografiado.
Ahora, Susana, aunque con pulmones ajenos, respira de nuevo. Y con ella respiran los afectados m¨¢s graves, nueve personas que viven en la cuerda floja y que vislumbran en la evoluci¨®n de Susana su, propio futuro.
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