Un profeta alcoholizado

David Koresh, de 33 a?os, es hijo natural de un carpintero al que localiz¨® en la gu¨ªa de tel¨¦fonos y conoci¨® a los 17 a?os. Bebedor empedernido de cerveza y guitarrista frustrado de rock, memoriz¨® el Nuevo Testamento a los 12 a?os para hacer frente a las burlas de sus compa?eros. Naci¨® en Houston con el nombre de Vernon Howell, que cambi¨® en 1990, que consider¨® m¨¢s digno del l¨ªder de la secta de los davidianos, una escisi¨®n de los Adventistas del S¨¦ptimo D¨ªa creada en 1934 por el b¨²lgaro V¨ªctor Houteff.Houteff estableci¨® en Waco, en 1935, el cuartel general davidiano, adonde le siguieron numerosos disidentes convencidos de que era un profeta. La vida en la secta, que transcurr¨ªa bajo una estricta moralidad, cambi¨® en 1984, cuando Koresh logr¨® el liderazgo. Los relatos de davidianos que abandonaron el grupo han denunciado que Koresh, adem¨¢s de su esposa tiene unas 15 mujeres de acuerdo con la idea de que ¨¦l es el Rey y que le corresponde tener muchos hijos para que reinen con ¨¦l en el Para¨ªso. Estos relatos apuntan a que somete a habituales abusos sexuales a las ni?as menores de la secta.

Koresh convenci¨® a sus adeptos de que es el Carnero del Libro, vuelto a la tierra para desencadenar el fin del mundo que, seg¨²n sus c¨¢lculos, estar¨¢ precedido por persecuciones, el asedio a la secta y el martirio de ¨¦l y los suyos.