El FBI y los forenses buscan entre las cenizas indicios de como ocurri¨® la tragedia de Waco
La tormenta de la noche del lunes enfri¨® las cenizas a las que ha quedado reducida la granja tejana de la rama de los davidianos y permiti¨® ayer que los agentes federales iniciaran el rescate, de los cuerpos de los 69 adultos y 17 ni?os, que se cree que han perecido bajo las llamas de este apocalipsis decretado por el l¨ªder David Kor¨¦sh. El fuego ha hecho desaparece rdel paisaje la fortaleza de los seguidores del hombre que cre¨ªa ser Jesucristo y ha destruido las pruebas de lo que ocurri¨® en los 51 d¨ªas de asedio, pero, sobre todo, ha dejado un gran n¨²mero de preguntas sin respuesta que deber¨¢n ser contestadas por un equipo de forenses e investigadores federales.
Este masivo suicidio colectivo ha congelado la sangre de los habitantes de Waco que lo presenciaron en directo y ha llenado de horror a los familiares de los miembros de la secta que siguieron la muerte de sus seres queridos en directo a trav¨¦s de la televisi¨®n.La carretera de acceso a la granja tiene ese aire de desolaci¨®n que queda tras un desenlace largamente esperado. Sin ¨¦mbargo, no hay signos de alivio en Waco, porque ninguna de las personas implicadas que han fabulado durante 51 d¨ªas sobre las caracter¨ªsticas del desenlace pod¨ªan esperar algo peor.
El FBI hab¨ªa discutido hace semanas con los bomberos planes para prevenir la posibilidad de un incendio. Sin embargo, el d¨ªa que decidi¨® asaltar la granja prefiri¨® esperar a que se produjera la primera llama antes de que llegaran los bomberos al lugar de los hechos. Cuando llegaron, 35 minutos m¨¢s tarde, a las cercan¨ªas del rancho de los davidianos poco quedaba por hacer. El fuerte viento que azotaba la llanura hab¨ªa extendido el fuego hasta casi consumir totalmente la estuctura de madera. Los bomberos se enfrentaban, adem¨¢s, a la dificultad a?adida de que hac¨ªa semanas que el abastecimiento de agua hab¨ªa sido interrumpido por el FBI como parte de su guerra psicol¨®gica contra los habitantes del complejo.
El portavoz del FBI, Jeffrey Jamar, dijo ayer que no hab¨ªa avisado antes a los bomberos porque no quer¨ªa arriesgar su vida desplaz¨¢ndolos hasta el lugar de los hechos.
Falta de paciencia
Los ex miembros de la secta Debbie Bunds y Mark Breauld fueron filmados mientras asist¨ªan en directo desde sus televisiones al suicidio colectivo de la secta a la que pertenecieron hasta hace tres a?os. Ellos, al igual que Jim West, que perdi¨® ayer a SU mujer y a sus cinco hijos en el rancho de Waco, realizaron agrios comentarios contra la falta de paciencia demostrada por el- FBI. "David Koresh es, sin duda, el responsable del incendio. ?l es el responsable de la muerte de los ni?os. Tuvo 51 d¨ªas para dejarles salir y no lo hizo. ?l tiene la responsabilidad de esta cat¨¢strofe explic¨® el portavoz del FBI para desvincular la decisi¨®n federal de lanzar los gases lacrim¨®genos para forzar la rendici¨®n de los miembros de la secta de la tragedia que lleg¨® a continuaci¨®n.Los agentes federales han asegurado que mientras lanzaban gas en el complejo vieron c¨®mo miembros de la secta vestidos de negro derramaban combustible y prend¨ªan fuego al grito de "ya est¨¢ ardiendo, ya est¨¢ ardiendo". Koresh hab¨ªa profetizado. un final apocal¨ªptico para su secta. Seg¨²n el FBI, haber cedido a la ¨²ltima de sus demandas para que se le permitiera descifrar los secretos del libro del Apocalipsis antes de rendirse no hubiera variado el tr¨¢gico final, ya que las autoridades est¨¢n convencidas de que ¨¦ste era el final que ¨¦l persegu¨ªa desde un principio.
La ¨²ltima persona ajena al FBI que habl¨¦ con Koresh, su abogado, Dick De Guerin, asegur¨® ayer que no hab¨ªa percibido en sus conversaciones con el l¨ªder religioso ninguna intenci¨®n de quitarse la vida. Seg¨²n el abogado, la acci¨®n del FBI precipit¨® el suicidio colectivo al cambiar su t¨¦cnica de mantener la paciencia por una acci¨®n agresiva. "Ver c¨®mo los tanques levantan los muros de tu casa e inyectan gases lacrim¨®genos s¨®lo puede ser interpretado por los que lo ven desde dentro como la llegada del apocalipsis", dijo el letrado antes de a?adir que la acci¨®n del FBI no estaba justificada.
Una de las grandes inc¨®gnitas que quedan tras la destrucci¨®n del rancho es por qu¨¦ el FBI decidi¨® pasar a la acci¨®n precisamente ayer, tras una paciente espera de 51 d¨ªas.
Tres posibidades
Ayer se empezaron a unir las piezas para reconstruir el complejo rompecabezas de lo que ha ocurrido. S¨®lo nueve seguidores de los davidianos sobrevivieron al incendio. Cinco de ellos est¨¢n ingresados en pri¨ªsion y cuatro en hospitales para tratar sus quemaduras y fracturas ¨®seas. Todos ellos est¨¢n bajo el control del FBI, que tiene restringido el acceso a la prensa.El resto de los davidianos est¨¢n presuntamente carbonizados bajo los escombros y ahora ser¨¢n los forenses Jos que deterininen lo sucedido durante los ¨²ltimos minutos antes de su fallecimiento. "Vamos a centrar nue stra investigaci¨®n en tres posibilidades: la primera, en que antes de que se iniciaran las llamas hubieran decidido envenenarse; la segunda, que hubieran fallecido por disparos, o que hubieran decidido ahorcarse", explic¨® el jefe de forenses del condado de Tarrant, Ed Bodiford.
En Waco se vive el d¨ªa despu¨¦s de la cat¨¢strofe desde muy distintas perspectivas. Los agentes del FBI insisten en que lo que-ha ocurrido all¨ª ha sido la consecuencia de la locura de un fan¨¢tico por llevar a la muerte a sus seguidores. Los especialistas en t¨¢cticas terroristas coinciden en parte con el abogado de Koresh en apuntar una serie de errores t¨¢cticos por parte del FBI, como no llevar el coche de bomberos y decidir agujerear con tanques la vivienda de los davidianos como un elemento precipitador de la cat¨¢strofe.
La furia popular se centra en c¨®mo el FBI no pudo, o no supo, en los 51 d¨ªas que tuvo para preparar su estrategia, idear un plan que protegiera de este desenlace a los ni?os.
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