La Legi¨®n, entre dos fuegos
Musulmanes y croatas piden la mediaci¨®n de las tropas espa?olas en Bosnia
La guerra abierta entre croatas y musulmanes en Bosnia central y Herzegovina ha puesto a los soldados espa?oles destacados en la regi¨®n bajo bandera de la ONU ante su m¨¢s dif¨ªcil reto. La apertura de nuevos frentes de batalla ha obligado a ampliar las zonas en las que se desarrolla su misi¨®n de paz. Desde el martes, blindados espa?oles patrullan por las calles de Mostar, Konjic y Prosivici, escenarios de algunos de los combates m¨¢s sangrientos de estos d¨ªas.
El objetivo es evitar la reanudaci¨®n de los choques armados a gran escala entre ambos bandos y permitir la r¨¢pida implementaci¨®n del alto el fuego de principio acordado en la noche del lunes por el vicepresidente bosnio, Ejup Ganic, y el n¨²mero dos de las Consejo de Defensa Croata (HVO), Jadranko PrIffic, en un encuentro que se realiz¨®, por sorpresa, en el cuartel espa?ol de Medjugorje.La ampliaci¨®n de la misi¨®n espa?ola, centrada hasta ahora en dar escolta a los convoyes humanitarios entre las localidades de Metkovic, el granero humanitario de Sarajevo, y Tarcin, supone, ajuicio de los miembros de la agrupaci¨®n, una prueba de que est¨¢n "haciendo muy bien" su trabajo. La petici¨®n de iniciar patrullas en el interior de las ciudades de Mostar, Konjic y Prosivici ha partido de los propios bandos enfrentados, musulmanes y croatas, quienes lo propusieron en la reuni¨®n que, bajo la presidencia del comandante de las tropas de las Naciones Unidas en Bosnia-Herzegovina (Unprofor), Philippe Morillon, se celebr¨® de forma inesperada en la noche del lunes en Medjugorje.
Las excelentes relaciones de los cascos azules espa?oles con los bandos enfrentados, hecho ponderado por ambos, les ha permitido desempe?ar ahora un papel esencial en el intento de mediaci¨®n -aunque de momento sin los resultados esperados- entre las milicias croatas y musulmanas que desde el pasado jueves combaten en diversos puntos de Bosnia central y Herzegovina. Este buen clima no les ha privado, sin embargo, de alg¨²n que otro susto en los ¨²ltimos d¨ªas.
El pasado fin de semana, un carro de combate croata situado en uno de los controles de la carretera apunt¨® con su ca?¨®n a la guarnici¨®n espa?ola en Jablanica. "Debi¨® de ser para probar a los nuevos", asegur¨® un oficial de la Agrupaci¨®n Canarias -el lunes lleg¨® a Split el grueso de las fuerzas-, pero que cuenta con una avanzadilla en la zona desde hace varios d¨ªas. La guarnici¨®n espa?ola respondi¨® a la provocaci¨®n croata colocando sus blindados en posici¨®n de disparo. El movimiento giratorio de las torretas fue suficiente. El tanque croata baj¨® su arma. El juego hab¨ªa terminado.
Ambiciones territoriales
Los intentos de alto el fuego auspiciados por los espa?oles y por el general Morillon han tropezado hasta ahora con las ambiciones territoriales de los contendientes, sobre todo de los croatas, quienes intentan acumular el m¨¢ximo de territorio otorgado por el plan Vance-Owen antes del 26 de abril, fecha en la que entra en vigor la ¨²ltima resoluci¨®n del Consejo de Seguridad de la ONU que endurece las sanciones contra Serbia y Montenegro.
La zona caliente del amplio frente de guerra abierto entre croatas y musulmanes, que hasta hace seis d¨ªas combat¨ªan juntos contra el enemigo com¨²n, los serbios, comprende las localidades de Jablanica, Konjic, Zenica y Vitez, donde las tropas brit¨¢nicas se han visto condenadas a vivir dos d¨ªas en los b¨²nqueres atrapadas en medio de dur¨ªsimos combates. El mando espa?ol se muestra convencido de que es m¨¢s factible lograr el asentamiento del alto el fuego, pactado en principio el lunes en Medjugorje, en la zona espa?ola -que comprende Jablanica, Konjic y Mostar-, que en la zona brit¨¢nica, que incluye la conflictiva Vitez, donde el grado de ensa?amiento de la artiller¨ªa croata recuerda los ataques serbios.
En la zona croata-musulmana ya hay casos de limpieza ¨¦tnica, sobre todo en algunas localidades musulmanas, como Sovici, donde 600 personas han huido despavoridas hacia Jablanica dejando atr¨¢s todas sus pertenencias por temor a las represalias del HVO.
Los combates de Bosnia central, que han supuesto el corte de la carretera de Jablanica y la de Tuzla, han colocado a estas dos ciudades en una situaci¨®n dif¨ªcil. Los suministros alimentarios no pueden llegar desde hace una semana. Fuentes del destacamento espa?ol advert¨ªan ayer que la comida de Jablanica, por ejemplo, se puede acabar en pocos d¨ªas. En Metkovic, donde el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) almacena los v¨ªveres y medicinas que luego env¨ªa carretera arriba hacia Sarajevo, Vitez o Tuzla, la despensa est¨¢ casi vac¨ªa.
La caridad de las organizaciones humanitarias internacionales se enfrenta con un imprevisto conocido: ¨¦sta es una guerra sin coraz¨®n, donde el hambre es la bala m¨¢s certera.
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