El Ayuntamiento ofrece un juego violento en la Fiesta del Ni?o de Tetu¨¢n

Los 30.000 chicos madrile?os que participaron en la tarde de ayer en la Fiesta del Ni?o 1993, organizada por la Junta de Distrito de Tetu¨¢n, se encontraron con una nueva atracci¨®n. Un cuadril¨¢tearo hinchable llamado Boxi-Run en el que los chavales menores de 10 a?os pod¨ªan arrearse mandobles. Eso s¨ª, cubiertos por un casco protector y provistos de grandes guantes acolchados. La concejal de Tetu¨¢n, Mar¨ªa Antonia Su¨¢rez (PP), asegur¨® que no ve¨ªa "ning¨²n peligro en este juego inofensivo". Para el edil socialista L¨¦andro Crespo, la atracci¨®n es "una incitaci¨®n a la violencia".

La tradicional Fiesta del Ni?o de Tetu¨¢n est¨¢ gestionada por una empresa privada desde el a?o pasado. La compa?¨ªa adjudicataria, Heptaxport , asegura que la atracci¨®n, que se asemeja a, un cuadril¨¢tero de boxeo, se denomina Juego de Room, aunque en el programa del festejo figura como BoxiRun.Los, tres monitores de este juego aseguraron que s¨®lo se permite el acceso al cuadril¨¢tero -gratuito- a ni?os menores de 10 a?os. "Dif¨ªcilmente se pueden hacer da?o con unos guantes de 60 cent¨ªmetros de largo y, 40 de ancho, que apenas pueden manejar", explicaron. Los chicos que sub¨ªan al ring, por un tiempo m¨¢ximo de tres minutos, llevaban un casco protector en la cabeza, como el utilizado en los combates de boxeo ol¨ªmpico. Sin embargo, este peri¨®dico pudo comprobar c¨®mo muchachos de 13 y 14 se enfundaron tambi¨¦n los guantes. "Se atizaban de lo lindo", comentaba entre risas uno de los monitores que controlaban la atracci¨®n.

"S¨®lo empujones"

Para Heptaxport, el juego -importado del Reino Unido- no genera violencia. Javier Rodr¨ªguez, director de la empresa, afirm¨® que los pedagogos, licenciados en Educaci¨®n F¨ªsica y maestros que lo han analizado han llegado a la conclusi¨®n de que no es agresivo. "Existen otras actividades en la Fiesta del Ni?o que s¨ª podr¨ªan generar m¨¢s violencia, como el yudo y el f¨²tbol sala", aventur¨® Rodr¨ªguez.Su empresa, que lleva tres a?os trabajando para el Ayuntamiento, obtuvo la concesi¨®n de la organizaci¨®n de la Fiesta del Ni?o tras un concurso p¨²blico. La Junta de Tetu¨¢n desembolsa cinco millones de pesetas como pago a la compa?¨ªa.

La concejal presidente del distrito de Tetu¨¢n, Mar¨ªa Antonia Su¨¢rez, asegur¨¦ anoche que una comisi¨®n de fiestas hab¨ªa dado luz verde al programa de actividades tras examinar el programa, incluido el BoxiRun. La edil dijo que no entend¨ªa c¨®mo se pod¨ªa dar importancia a "un juego donde s¨®lo hay empujones". Y a?adi¨®: "No creo que haya en este juego ning¨²n peligro; existen otros con mucho m¨¢s riesgo".

Jos¨¦ Gabriel Astudillo, concejal de Deportes del Ayuntamiento, asisti¨® ayer a la fiesta infantil. En su opini¨®n, el juego era "divertido e inofensivo".

Sin embargo, el concejal socialista Leandro Crespo, responsable del distrito de Tetu¨¢n entre 1986 y 1989, afirm¨® ayer que este tipo de atracciones suponen "una incitaci¨®n a la violencia". "Es impresentable que se exhiba la agresividad cuando se deber¨ªa fomentar lo contrario: la, solidaridad", advirti¨® Crespo, que aprovech¨® para criticar el excesivo n¨²mero de vendedores ambulantes que deambulaban ayer por la calle de Bravo Murillo, cortada al tr¨¢fico durante la fiesta.

A lo largo de la tarde, varios padres mostraron su oposici¨®n a que sus hijos accedieran al Boxi-Run. Manuel del Palacio, empleado de banca, relat¨®: "En un principio parece gracioso, aunque objetivamente no es positivo, porque si lo utilizan ni?os grandes puede que se hagan da?o". Otro padre, Jos¨¦ Mora, se peleaba a gritos con su hijo para convencerle de que no subiese al cuadril¨¢tero. "Empieza como un juego y luego puede acabar mal", razon¨®.

Pero tambi¨¦n hab¨ªa madres, como Mar¨ªa Teresa Sanz, que dejaban acceder al Boxi-Run a su hija de cinco a?os: "Hay otras cosas que generan m¨¢s violencia que ese juego". De la misma opini¨®n era Jaime D¨ªaz, que aseguraba que todo lo que sea diversi¨®n le parec¨ªa bien. "Creo que no genera violencia,, porque los cr¨ªos se lo toman a guasa", explic¨® otro padre, Juan Carlos Mart¨ªnez.

Y Benjam¨ªn L¨®pez reconoc¨ªa: "No me hace mucha gracia... pero mi hijo no para de insistirme".