La campa?a de las tropel¨ªas

"Aquella ciencia que llaman tropel¨ªa, que hace parecer una cosa por otra", Cervantes dixit, define la precampa?a en curso y marcar¨¢, si no ponemos un freno entre todos, la campa?a en su recta final. El caso KIO, precisamente, es, por vanas razones, un cap¨ªtulo de las tropel¨ªas. Francisco ?lvarez Cascos, secretario general del PP, ha le¨ªdo un art¨ªculo m¨ªo para apoyar sus construcciones. Se lo agradezco, pero pong¨¢monos todos en nuestro sitio.El 14 de enero, ?lvarez Cascos anunci¨® que su partido pod¨ªa presentar una querella por prevaricaci¨®n. El lunes pasado, ?lvarez Cascos inform¨® que el PP encuentra culpables de un presunto delito de prevaricaci¨®n a varios miembros del Gobierno, incluyendo a Felipe Gonz¨¢lez, y que ha aplazado la eventual acci¨®n penal hasta conocer el resultado de las elecciones del 6 de junio. A ?lvarez Cascos no se le puede sino felicitar por lograr dos titulares de primera pagina, el 15 de enero y el 11 de mayo, anunciando una querella por prevaricaci¨®n... aplazada.

Tengo para m¨ª que el dossier celeste de ?lvarez Cascos est¨¢ formado, en un 75%, por documentos que obtuvo entre juristas que actuaron de buena fe. Lo m¨¢s importante que buscaba el diputado no pudo obtenerlo. Tampoco hubiera arrojado luz sobre ninguna mentira, seg¨²n he comprobado al comparar la carta con las comparecencias en el Congreso.

El esquema es sencillo: para ital¨ªanizar la corrupci¨®n espa?ola es necesario enlodar al Gobierno de modo directo, esto es, a sus ministros y si fuese posible, al presidente. El caso KIO, por la desaparici¨®n de casi 500.000 millones de pesetas, ofrece la historia perfecta. Una encuesta que se conocer¨¢ la semana pr¨®xima muestra que es un tema espont¨¢neamente conocido por la opini¨®n p¨²blica: un 37% de las personas cree que el financiero Javier de la Rosa es el principal responsable del esc¨¢ndalo; un 15,121/6 estima que el Gobierno es el segundo responsable. Por tanto, aqu¨ª hay tela electoral.

?lvarez Cascos busc¨® sin ¨¦xito una carta de Jos¨¦ Mar¨ªa Escondrillas dirigida a Carlos Solchaga. En la carta, del 29 de diciembre de 1987, Escondrillas escribi¨® al ministro "en la l¨ªnea de lealtad que me precio de haber mantenido contigo", explic¨¢ndole que no era ajustado a derecho la entrada de KIO en el capital y el consejo de ERT. Esa carta acompa?aba a un dictamen del mercantilista Evelio Verdera. Pero Solchaga nunca ha negado que el Gobierno conociese la existencia de KIO. El 9 de febrero explic¨® en el Congreso que se entrevist¨® el 30 de septiembre de 1987 con el ministro de Finanzas kuwait¨ª en Washington. Agrego por mi parte que Gonz¨¢lez mand¨® a Londres a un propio -Julio Feo- por esas mismas fechas para que KIO enviara a un representante directo -no De la Rosa- para hablar con Solchaga. Feo nada dice en sus. memorias sobre esta misi¨®n... cuenta habida de que sus historias acaban en junio de 1987. Por tanto, la tropel¨ªa consiste en mostrar que la verdad de KIO andaba por Madrid a sombra de tejado, en lenguaje cervantino. El Gobierno adujo que actu¨® en legalidad y el PP no ha demostrado lo contrario.

La posici¨®n del PP s¨ª mantiene a la sombra de tejado a los gestores encabezados por De la Rosa y Fouad Jaffar y otros kuwait¨ªes. Y last but not least, la responsabilidad del Gobierno de Gonz¨¢lez existe: deber¨ªa haber controlado la actividad de unos bribones con historial p¨²blicamente conocido.