Pol¨¦mica en Italia al considerar el Supremo que la violaci¨®n en el matrimonio no es delito
La sentencia del Tribunal Supremo italiano de que violar a la propia esposa "por amor" es "un hecho", pero no un "delito", ha levantado una oleada de protestas en este pa¨ªs, sobre todo por parte de las mujeres, que aseguran que se ha dado un nuevo paso atr¨¢s en la defensa de sus derechos. La pol¨¦mica sentencia est¨¢ relacionada con el caso de Daniela Bologna, de 43 a?os, una ama de casa que denunci¨® hace tres a?os que su marido, Gianfranco Napoleoni, de 44, en varias ocasiones le peg¨® y maltrat¨® f¨ªsicamente, le rompi¨® las ropas y comenz¨® a abusar sexualmente de ella.
La sentencia ha ca¨ªdo como un jarro de agua fr¨ªa, y los diarios italianos hablaban ayer de que se trata de un veredicto "desconcertante", "propio de otros tiempos", y que avala la "aberrante tesis machista" de que la mujer "es todav¨ªa propiedad del marido".En un primer juicio, celebrado en 1990, los jueces de la localidad de Pomezia, cercana a Roma, donde vive la mujer, condenaron al hombre a nueve meses de c¨¢rcel por violencia carnal. El marido aleg¨® que era "por amor", con la intenci¨®n de recomponer el matrimonio.
El Tribunal de Apelaci¨®n, por el contrario, sentenci¨® a favor del hombre, asegurando que el "hecho no constituye delito, ya que el marido estaba convencido de que si manten¨ªan relaciones sexuales se pod¨ªa salvar el matrimonio y restablecer la armon¨ªa conyugal".
Y es que el matrimonio estaba a punto de separarse por los celos del marido, que acusaba a la esposa -que trabajaba hasta primeras horas de la noche- de traicionarle y enga?arle con otros hombres. Debido a ello, los bofetones y pu?etazos y los gritos e insultos eran normales en aquellos meses en el domicilio de los Napoleoni-Bologna.
Tras la sentencia del Tribunal de Apelaci¨®n, Daniela Bologna recurri¨® al Tribunal Supremo, cuya tercera sesi¨®n compuesta s¨®lo por hombres ha confirmado lo dictado por la apelaci¨®n.
Salvar la pareja
La tesis de los jueces es que para demostrar la violencia carnal no basta el expl¨ªcito rechazo de la mujer, no basta que la esposa grite y que le sean arrancados los vestidos. Aunque reconocen que la oblig¨® a irse a la cama, agarr¨¢ndola por el cuello, el hombre lo que intent¨®, "aunque fuera de manera equivocada", era que "se repensara el matrimonio y salvara la pareja. Todo era por amor".Para los jueces, son indispensables pruebas "m¨¢s espec¨ªficas", ya que se trata de un caso entre esposos.
Daniela Bologna dijo ayer que los jueces no han tenido en cuenta el miedo a vivir en la misma casa de una persona que "te maltrata", el terror al escuchar las llaves que cierran la puerta del dormitorio, las patadas, los insultos "y el pensar que ¨¦l ahora me violar¨¢".
"Intentad pensar, jueces, lo que significa ser estrellada contra la pared, una mano de tu marido que te intenta estrangular y la otra que comienza a desnudarte, entre patadas y golpes, oblig¨¢ndote a mantener una relaci¨®n sexual que t¨² no quieres. Si eso ocurre fuera de la casa es violaci¨®n, pero si es dentro del domicilio lo llam¨¢is un acto de arnor", se lament¨® la mujer.
La abogada de Bologna, Silvana Ravel, ha afirmado, por su parte, que la sentencia es el "peor ejemplo de machismo zafio y redomado que puede existir. Vamos hacia atr¨¢s en la defensa de los derechos de la mujer".
Para la juez Mar¨ªa Gabriella Luccioli, la violaci¨®n es violaci¨®n siempre y no, hay nada que lo justifique, y para la abogada Tina Lagostena Bassi la sentencia es "medieval" y demuestra que todav¨ªa existen jueces que tienen una cultura muy cercana a la de la violencia sexual.
La asociaci¨®n de jueces de Magistratura Democr¨¢tica ha convocado una manifestaci¨®n para la pr¨®xima semana ante el Gobierno Civil de Roma, donde entregar¨¢n un proyecto de ley contra las molestias sexuales.
Giuliana Dall Pozzo, presidenta de la Asociaci¨®n de Defensa de la Mujer Tel¨¦fono Rosa, se?al¨® que todav¨ªa la mujer est¨¢ considerada como un objeto de propiedad del marido y que el esposo as¨ª lo cree, "y por tanto piensa que tiene poder hasta para violarla".
El diario Corriere della Sera escrib¨ªa ayer que se acababa de retroceder en el reconocimiento de los derechos de las mujeres, y L'Unita se?alaba que la sentencia del Supremo, a la que considera inaceptable, "anula veinte a?os de palabras y batallas, veinte a?os en los que las mujeres y algunos hombres de buena voluntad intentaron civilizar a este pa¨ªs".
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