El error del f¨¦mur

En 1894, Eug¨¨ne Dubois public¨® sus primeros escritos acerca del hallazgo del Pitec¨¢ntropo. Ya entonces explic¨® que el f¨¦mur hab¨ªa aparecido un a?o despu¨¦s que el cr¨¢neo y a 12 metros de distancia. El cient¨ªfico, conocido por su precisi¨®n, mantuvo siempre su creencia de que ambos pertenec¨ªan al cuerpo.Para los palcoantrop¨®logos Antonis Bartsiokan (Universidad ole Liverpool, Reino Unido) y Michael Day (Museo de Historia Natural, Londres) su ilustre colega se equivoc¨® al fechar los restos. Ambos sostienen que los huesos aparecieron en dos estratos de tierra diferentes. El f¨¦mur ser¨ªa as¨ª varios miles de a?os m¨¢s moderno que el resto y no pertenece al homo erectus sino al homo sapiens.

Para probar su teor¨ªa han utilizado una nueva t¨¦cnica que analiza la composici¨®n qu¨ªmica de los huesos. Bartsiokan y Day afirman que las proporciones de calcio y f¨®sforo son distintas en el cr¨¢neo y el f¨¦mur. Ello se debe a que los excavadores alcanzaron en la isla de Java una capa de tierra distinta, mucho m¨¢s moderna, a pesar de su proximidad para encontrar el hueso de la pierna. Dubois no repar¨® en ello y de ah¨ª que creyera que los dos f¨®siles correspond¨ªan al mismo individuo. El nuevo estudio aparece en la revista Proceedings of the Royal Society Lon don y del mismo se ha hecho eco ahora el matutino holand¨¦s De Volkskrant. Para Jan Sliikkerveer, no aporta en realidad una luz nueva sobre el Pitec¨¢ntropo. "Yo no tengo dudas acerca de los descubrimientos de Dubois. De entre los 40.000 restos de flora y fauna que extrajo de la tierra en Indonesia s¨®lo los tres que se han hecho famosos eran humanos. De todos modos, es una pena que su nombre siga despertando s¨®lo la pasi¨®n por los f¨®siles y la ¨¦poca a la que pertenecen".