Coherencia

Sorprendentes las sorpresas por el tono duro empleado por el portavoz de IU-IC, Rafael Rib¨®, al que s¨®lo cabe pedirle que sonr¨ªa de vez en cuando y se someta a un curso acelerado de iron¨ªa. Por lo dem¨¢s, Rib¨® dijo verdades objetivas y le ocurri¨® lo mismo que al personaje de No soy Stiller, de Frish, que como dice verdades objetivas le toman por marxista.Rib¨® fue fiel a su estilo de recordar al antagonista todo lo que ha dicho y no ha hecho, como muy bien ha experimentado en sus propias carnes pol¨ªticas Jordi Pujol. Coherente tambi¨¦n el presidente Gonz¨¢lez recurriendo al justificante del oro de Mosc¨² para compensar sus Filesas.

Gonz¨¢lez pertenece a la cultura de la guerra fr¨ªa y ¨¦l mismo es un pol¨ªtico prefabricado en el ¨²ltimo laboratorio de pol¨ªticos de la guerra fr¨ªa, y ante el dilema de recrear o liquidar la izquierda que tiene planteado la socialdemocracia en todo el mundo, Gonz¨¢lez es partidario de la liquidaci¨®n de fin de temporada.

Tragar o no tragar, ¨¦sta es la cuesti¨®n que se plantea al llamado guerrismo, al que le llega la hora de la verdad program¨¢tica despu¨¦s de tanta escaramuza antropol¨®gica contra la beautiful people. Supongo que el guerrismo ser¨¢ algo m¨¢s que una man¨ªa persecutoria y perseguidora ejercida frente a los socialistas se?oritos, se?oritos de estirpe o de adopci¨®n. Adoptado por las cluecas de la posmodernidad, Gonz¨¢lez es como un Pinocho consentido al que no se le puede llevar la contraria, y as¨ª se comprueba cuando pierde los estribos ante r¨¦plicas que le se?alan directa y objetivamente la nariz. Por lo dem¨¢s, pese a los desaires iniciales, coherente su m¨¦nage ¨¤ trois en el que el PNV pone el centro, Solchaga la derecha y Roca el Esp¨ªritu Santo.