Los franceses, esc¨¦pticos ante la rebaja de impuestos
Si en algo estaban ayer de acuerdo los comentaristas pol¨ªticos y econ¨®micos franceses era en admirar la habilidad de ?douard Balladur, calificado de "el alquimista" por Frariz-Olivier Giesbert en Le Figaro. En el momento en que sus compatriotas regresan de las vacaciones de verano, el primer ministro les da la buena noticia de una reducci¨®n de la presi¨®n fiscal directa. A¨²n m¨¢s extraordinario, Balladur consigue que este caramelo haga olvidar que hace unas semanas les subi¨® muchos impuestos indirectos y tambi¨¦n la Contribuci¨®n Social Generalizada (CGS).Balladur est¨¢ probando ser un mago de la conducci¨®n sobre una carretera deslizante. En sus cinco meses al frente del Gobierno, ha apretado una semana el acelerador de la actividad econ¨®mica para pisar a la siguiente con la misma energ¨ªa el pedal del freno. ?l lo justifica hablando de "pragmatismo" y "realisino".
Jean Glavany, portavoz del Partido Socialista (PS), emple¨® ayer otra f¨®rmula. El Gobierno de Balladur, dijo, es el "Gobierno de la palabra". "Esta presencia permanente en los medios de comunicaci¨®n, esta especie de demagogia del primer ministro tranquiliza por el momento a los franceses", reconoci¨® Glavany. Pero el portavoz socialista a?adi¨®: "Nada concreto ni s¨®lido ha sido anunciado para terminar con la recesi¨®n".
En un art¨ªculo de la primera p¨¢gina de Le Monde titulado "Modificaciones", Thierry Br¨¦hier escribi¨®: "El primer ministro no ten¨ªa, manifiestamente, gran cosa que anunciar en concreto". Y sin embargo, Balladur confirm¨® lo que ya hab¨ªa parcialmente adelantado a mediados de agosto: El Estado franc¨¦s dejar¨¢ de recaudar el a?o pr¨®ximo 17.000 millones de francos en concepto de IRPF y ofrecer¨¢ ventajas fiscales para los que compren viviendas particulares.
?C¨®mo se explica el escepticismo con que la oposici¨®n y numerosos analistas han acogido el en¨¦simo programa econ¨®mico del primer ministro? Liberation titul¨® su informaci¨®n sobre la conferencia de Prensa de Balladur como "El falso regalo de la baja de impuestos". Ese diario record¨® que la reducci¨®n de la presi¨®n fiscal en 17.000 millones de francos est¨¢ muy lejos de los 50.000 millones de francos que va a costarles a los franceses la subida de la CGS decida por Balladur la pasada primavera.
Oto?o caliente
Otros analistas subrayaron que el relanzamiento del consumo privado provocado por el aligeramiento del impuesto sobre la renta ser¨¢ contrarrestado por el hecho de que, a fin de contener el d¨¦f¨ªcit presupuestarlo en 300.000 millones de francos, el Gobierno limitar¨¢ en 1994 al 1,1 %, es decir menos que la inflaci¨®n, la progresi¨®n de los gastos del Estado. Este consumir¨¢ menos, lo que contribuir¨¢ a la aton¨ªa de la m¨¢quina econ¨®mica.Nicole Notat, secretaria general de la CFDT, afirm¨® ayer que "existen todos los ingredientes para un oto?o dif¨ªcil", y precis¨® que hay sectores franceses al borde de "la explosi¨®n social".
El Consejo Nacional de la Patronal Francesa (CNPF) expres¨® su apoyo a "la voluntad del primer ministro de mantener como prioridad el empuje a la actividad econ¨®mica y el empleo". No obstante, los empresarios dejaron claro que esperan "resultados concretos" y recordaron que la situaci¨®n econ¨®mica "no ha cesado de degradarse durante el primer semestre del a?o".
[En Espa?a, el portavoz del Grupo Popular en la Comisi¨®n de Econom¨ªa del Congreso, Crist¨®bal Montoro, se?al¨® que la iniciativa de Balladur "es un ejemplo a imitar" y reclam¨® una profunda reforma fiscal].
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