Una huelga en la estaci¨®n espa?ola de la NASA amenaza varias misiones
Un anuncio de huelga durante cuatro d¨ªas convocada por los trabajadores de la estaci¨®n de sat¨¦lites en Robledo de Chavela (Madrid), compromete las operaciones de seguimiento de varias misiones espaciales de la NASA, entre ellas la que pretende recuperar la sonda Mars Observer. El seguimiento y recepci¨®n de datos de la nave Galileo en su pr¨®ximo encuentro con el cometa Ida es otra de las misiones afectadas. El inicio de la huelga est¨¢ previsto para la tarde de hoy.
La estaci¨®n, en funcionamiento desde los a?os sesenta, responde a un acuerdo entre los Gobiernos de EE UU y Espa?a, a trav¨¦s de la NASA y el Instituto Nacional de T¨¦cnica Aeroespacial (INTA), y es uno de los tres puntos claves de la red de la NASA formada, adem¨¢s, por las estaciones de California (EE UU) y Camberra (Australia). El coste de operaci¨®n de las grandes antenas (1.600 millones de pesetas anuales) es pagado por EE UU. Actualmente trabajan 190 empleados, todos espa?oles, en el centro de Robledo, que apenas ha sufrido conflictos laborales en 30 a?os.El origen de este conflicto se remonta a mayo de 1992, cuando el Consejo de Ministros constituy¨® una empresa estatal (INSA), que se hizo cargo de la administraci¨®n de las estaciones espaciales de Robledo, Villafranca (Madrid) -dedicada a operaciones de la Agencia Europea del Espacio- y Maspalomas (Canarias). El presidente de INSA es Enrique Trillas, director general del INTA.
El a?o pasado se asegur¨® a los trabajadores de la estaci¨®n que mantendr¨ªan todos sus derechos laborales, afirm¨® ayer Luis S¨¢nchez Fern¨¢ndez, presidente del comit¨¦ de huelga de Robledo. "Hemos convocado paros de dos horas hoy y los pr¨®ximos d¨ªas 14, 15 y 17 para que la huelga no recaiga sobre un s¨®lo turno de trabajo, puesto que la estaci¨®n funciona d¨ªa y noche", explic¨® ayer S¨¢nchez.
El conflicto de Robledo ha estallado por un desacuerdo salarial entre INSA, que ofrece un incremento del 3,2%, y los trabajadores, que piden un 3,7%, de acuerdo a lo establecido por la comisi¨®n hispano-estadounidense que determina la retribuci¨®n econ¨®mica del personal que trabaja para el Gobierno de EE UU. Con la constituci¨®n de INSA, los trabajadores consideran amenazados sus derechos adquiridos como personal contratado por la administraci¨®n p¨²blica (INTA).
La empresa entiende que sus trabajadores no se rigen por las indicaciones de esa comisi¨®n, coment¨® ayer Jos¨¦ Mar¨ªa Parga, secretario general de INSA, aunque se respetan sus derechos adquiridos. A la hora de cerrar esta edici¨®n continuaban las negociaciones entre las dos partes.
"Estamos pendientes de hablar con la NASA", coment¨® Parga. Seg¨²n S¨¢nchez, los servicios m¨ªnimos establecidos por el comit¨¦ de empresa no podr¨ªan garantizar el seguimiento y recepci¨®n de datos de las misiones espaciales. "Si alg¨²n momento cr¨ªtico de las misiones coincidiera con la huelga, se perder¨ªan datos irrecuperables", dijo S¨¢nchez, aunque matiz¨®: "Somos profesionales y si hay una situaci¨®n realmente cr¨ªtica...".
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