Una discusi¨®n de 1.200 millones de pesetas
Arag¨®n, Galicia y Castilla y Le¨®n perder¨ªan con la nueva f¨®rmula
La participaci¨®n auton¨®mica en la recaudaci¨®n del impuesto sobre la renta en el territorio apenas supondr¨¢ un coste de 1.200 millones de pesetas para la caja general del Estado. Seg¨²n, la tercera propuesta del Gobierno, presentada ayer, la diferencia entre lo que recibir¨ªan las autonom¨ªas con el nuevo sistema respecto del anterior, de haberse aplicado en 1993, supondr¨ªa una ganancia clara para Catalu?a y Andaluc¨ªa, y p¨¦rdidas de alguna importancia para Galicia, Arag¨®n y Castilla y Le¨®n. Se trata s¨®lo de un ejercicio te¨®rico aplicado al a?o en curso que, como punto de partida, ser¨ªa neutral.En el documento entregado ayer por el Gobierno a los consejeros auton¨®micos -Procedimiento para la aplicaci¨®n de la corresponsabilidad fiscal en el sistema definanciaci¨®n de las comunidades aut¨®nomas- se incluyen por primera vez los c¨¢lculos econ¨®micos que resultan de las complicadas f¨®rmulas. El resultado es que la diferencia entre el sistema vigente y el que incorpora la participaci¨®n en el IRPF -1.200 millones de pesetas- no justificar¨ªa el esc¨¢ndalo pol¨ªtico que se ha organizado.
La foto fija para el a?o de partida es un ejercicio te¨®rico que revela lo que pasar¨ªa de haberse aplicado la corresponsabilidad fiscal en 1993, con la salvedad de que se trata de un a?o neutro; es decir, que las diferencias se sumar¨ªan o restar¨ªan para que el resultado final no var¨ªe. La cantidad a neutralizar -1.200 millones- es insignificante desde el punto de vista de los 1,755 billones de pesetas que alcanza el total de fondos que perciben las 15 comunidades aut¨®nomas como participaci¨®n en los ingresos del Estado.
Seg¨²n los c¨¢lculos entregados ayer, comunidades como Catalu?a y Andaluc¨ªa tendr¨ªan una diferencia a su favor, mientras que otras como Galicia, Arag¨®n y Castilla y Le¨®n estar¨ªan en desventaja. Aunque en el primer a?o todas las autonom¨ªas se quedan como -estaban respecto del sistema vigente, lo significativo es que, con la nuevas f¨®rmulas propuestas por el Gobierno, las de mayor ventaja estar¨ªan en mejores condiciones para obtener ganancias en los a?os siguientes.
Lo que est¨¢ en discusi¨®n es hasta qu¨¦ tope se deja al nuevo sistema operar en ca¨ªda libre, tanto al alza como a la baja. La propuesta entregada ayer por el Gobierno es que se ponga una "cl¨¢usula de garant¨ªa" para que ninguna comunidad reciba menos de lo que le corresponder¨ªa con el sistema vigente. Por el contrario, el Gobierno propone un "coeficiente corrector" a la baja para aquellas que consigan superar la recaudaci¨®n estimada. Este coeficiente no est¨¢ determinado en el documento.
La cuesti¨®n de los topes al alza o a la baja es esencial en un sistema de corresponsabilidad fiscal, motivo por el cual la decisi¨®n se ha aplazado hasta la nueva reuni¨®n del Consejo de Pol¨ªtica Fiscal, el 7 de octubre. Tampoco qued¨® claro cu¨¢l es el punto de partida. Las comunidades aut¨®nomas quieren que sea la recaudaci¨®n real, mientras que el Gobierno, en el documento entregado ayer, propone que se tenga en cuenta, adem¨¢s de este aspecto el del valor a?adido bruto. ?ste es un indicador econ¨®mico que mide la producci¨®n, en este caso para cada comunidad aut¨®noma, y permite estrechar el abanico entre lo que realmente se recauda y lo que se deber¨ªa obtener por el IRPF de acuerdo con la riqueza generada. En definitiva, permite fijar la participaci¨®n auton¨®mica en el IRPF con relaci¨®n tambi¨¦n al fraude fiscal y primar o penalizar los avances en este terreno.La importancia pol¨ªtica de la corresponsabilidad fiscal radica tambi¨¦n en que ¨¦ste es un primer germen de algo que, seg¨²n se acord¨® ayer, deber¨¢ ir m¨¢s all¨¢. El techo m¨¢ximo lo tienen en estos momentos el Pa¨ªs Vasco y Navarra.
Ambas autonom¨ªas tienen capacidad para aprobar sus propias leyes fiscales, aunque en el impuesto sobre la renta es pr¨¢cticamente una copia del estatal, y recaudan directamente para luego hacer cuentas con la Administraci¨®n central. El resto de las comunidades se someten a las leyes generales y recaudan directamente, seg¨²n los casos, el impuesto del patrimonio, las tasas sobre el juego, entre otros tributos de menor importancia.
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