"Una sonrisa hace m¨¢s que un presupuesto"

Manuel S¨¢nchez Monta?¨¦s, de 46 a?os, llevaba al frente de la sede provincial de Madrid del Instituto de Servicios Sociales (Inserso) seis a?os y muchas tardes de caf¨¦ y charla con los ancianos de la Comunidad. Su reciente destituci¨®n habr¨ªa sido una de tantas de no producirse la polvareda que ha originado. S¨¢nchez Monta?¨¦s, un funcionario ascendido por libre designaci¨®n, ha conseguido el raro privilegio de reunir la protesta de pol¨ªticos y administrados-asociaciones de minusv¨¢lidos y ancianos- contra la decisi¨®n de su superior. Pero el director general, H¨¦ctor Maravall, le achaca estar demasiado en la calle y descuidar la gesti¨®n.

Pregunta. ?Su destituci¨®n responde a alg¨²n tipo de represalia del sector renovador de los socialistas madrile?os? A usted le han apoyado tras su destituci¨®n los alcaldes guerristas.

Respuesta: No. Yo soy un funcionario en un puesto de libre designaci¨®n. Estos puestos los da y los decide el superior inmediato cuando lo cree oportuno.

P. Pero es bastante sintom¨¢tico que precisamente alcaldes del sur de la Comunidad de Madrid, adscrito al sector guerrista, se hayan quejado por esta destituci¨®n.

R: No solamente han sido ellos. Tambi¨¦n me han llegado adhesiones de otros ayuntamientos, unos cuarenta, que no son de la l¨ªnea pol¨ªtica de Ios que usted ha dicho. Ellos est¨¢ reconociendo una labor que se ha hecho durante seis a?os y est¨¢n pidiendo una continuida en la atenci¨®n de las necesidades de los minusv¨¢lidos, de tercera edad y, sobre todo, de los municipios.

P. ?C¨®mo ha sido su relaci¨®n con H¨¦ctor Maravall durante los once meses que ha estado bajo sus ¨®rdenes?

R. No ha habido nunca ninguna pega ni por su parte ni por la m¨ªa. He cumplido unas directrices. Si lo hemos hecho bien o lo hemos hecho mal, corresponde a ¨¦l decidirlo.

Imaginaci¨®n

P. ?C¨®mo ha entendido usted la gesti¨®n del organismo durante estos seis a?os?R. Nosotros entendemos que una pol¨ªtica de servicio social necesita de una dedicaci¨®n especial y de un contacto continuo con las necesidades de las clases m¨¢s desarraigadas. Todo ello aparte de un control serio de la distribuci¨®n de los recursos. Pero una sonrisa hace m¨¢s que un presupuesto. Muchas veces suplimos la falta de dinero con vocaci¨®n, imaginaci¨®n y, especialmente, con atenci¨®n directa a la gente.

P. Esto ha sido criticado desde la direcci¨®n general.

R. Yo estoy sujeto a las decisiones de mis responsables, pero no tengo que dar ninguna explicaci¨®n en cuanto a mi gesti¨®n administrativa. Tener sensibilidad y controlar los recursos no est¨¢ re?ido. Entiendo que debe haber un correcto control presupuestario y, al mismo tiempo, hay que estar en la calle. Esto es lo que hemos intentado hacer mi equipo y yo. La atenci¨®n fr¨ªa en estos sectores est¨¢ bien, pero no es suficiente. Yo soy del pueblo, joder. Muchas veces vas a un sitio y no puedes hacer un centro que necesita la tercera edad. Y eso se suple con escucharles, con atenderles; comiendo con ellos, con eso vale.

P. Las asociaciones de minusv¨¢lidos y de la tercera edad han convocado concentraciones ante el Ministerio de Asuntos Sociales.

R. Se ha desbordado todo. Agradezco las adhesiones de los minusv¨¢lidos y de los colectivos de la tercera edad, pero su postura de convocar una concentraci¨®n [prevista para el pr¨®ximo 7 de octubre] no es l¨®gica, y creo que se acabar¨¢ no celebrando.