Alfredo Pastor reconoce que la deuda p¨²blica rozar¨¢ en 1994 el 60% del PIB, l¨ªmite de Maastricht

El secretario de Estado de Econom¨ªa, Alfredo Pastor, reconoci¨®, por primera vez, que la deuda p¨²blica rozar¨¢ a finales de 1994 el l¨ªmite fijado en el Tratado de Maastricht, del 60% del PIB. En respuesta a las preguntas del diputado del Grupo Popular, Crist¨®bal. Montoro, Pastor cifr¨® en el 54,3% del PIB el monto actual de la deuda, que crecer¨¢ hasta el 59,7% a final del pr¨®ximo a?o.El secretario de Estado coincidi¨® con el gobernador del Banco de Espa?a, Luis ?ngel Rojo, en una actitud prudente respecto a la reducci¨®n de tipos de inter¨¦s y ambos defendieron la libertad de las entidades financieras para actuar sobre los mismos.

La comparecencia de Pastor ante la Comisi¨®n de Presupuestos del Congreso de los Diputados se caracteriz¨® por la repetici¨®n de los datos contenidos en el proyecto de ley de presupuestos para 1994, y la defensa de la credibilidad del equipo econ¨®mico del Gobierno. Insisti¨® en que el 3,5% de inflaci¨®n para el pr¨®ximo a?o es m¨¢s un objetivo que una previsi¨®n y lanz¨® algunos datos de ejercicios futuros, como la previsi¨®n del crecimiento del PIB, que cifr¨® sin mucho convencimiento en el 2,3% para 1995 y el 3,2% para 1996.

Respecto a las cr¨ªticas de Montoro sobre la mala situaci¨®n financiera del Estado, Pastor afirm¨® que el 59,7% de deuda p¨²blica "no supondr¨¢ un problema de solvencia por la previsible bajada de tipos de inter¨¦s, pero s¨ª puede ser preocupante a medio plazo". Se?al¨® que hay que seguir reduciendo el d¨¦ficit p¨²blico y a?adi¨® que "el primer esfuerzo cuando llegan los tiempos de prosperidad tendr¨¢ que ser el descenso del stock de deuda p¨²blica". No descart¨® medidas adicionales en 1994 si la econom¨ªa no reacciona seg¨²n lo previsto.

Rojo, que intervino antes, que Pastor, estuvo en su habitual l¨ªnea de defensa de un mayor equilibrio, entre las pol¨ªticas fiscal y monetaria. "Los tipos de inter¨¦s no pueden bajar sin l¨ªmite", dijo, "por el d¨¦ficit p¨²blico excesivo y el aumento de los costes salariales. No se puede tener todo a la vez y si se quieren tener tipos bajos hay que tomar otras medidas".

Respecto a la lentitud con la que la banca privada traslada las rebajas de los tipos oficiales a sus cr¨¦ditos, el gobernador se?al¨® que las entidades financieras est¨¢n reaccionando poco a poco porque el abaratamiento de los cr¨¦ditos debe ir acompa?ado de una reducci¨®n en los tipos del pasivo, cuya evoluci¨®n depende de la rentabilidad que ofrece la deuda p¨²blica a corto plazo contra la que compite.