La ca¨ªda de ingresos precipita el debate sobre la reforma de la Administraci¨®n del Pa¨ªs Vasco

Los 70.000 millones de pesetas que las haciendas vascas dejar¨¢n de recaudar este a?o han hecho sonar la alarma en el Gobierno vasco y han acelerado el debate sobre la reforma de la abultada y compleja Administraci¨®n aut¨®noma. De momento, adem¨¢s de recortar entre el 5% y el 26% las partidas presupuestarias de la mayor¨ªa de los departamentos, el Ejecutivo vasco ha optado por cubrir el agujero presupuestario del pr¨®ximo a?o con una emisi¨®n de deuda p¨²blica superior a los 70.000 millones de pesetas. La deuda en circulaci¨®n de la Administraci¨®n vasca ascender¨¢ as¨ª, a finales de a?o, a un total de 238.772 millones, casi el 6% del producto interior bruto de la comunidad.

Seg¨²n la Consejer¨ªa de Hacienda, que dirige Jos¨¦ Luis Larrea, los recortes en el gasto y el aumento de los d¨¦ficit p¨²blicos y, en principio, del propio d¨¦ficit presupuestario de 1993, deber¨ªan bastar para cubrir el baj¨®n recaudatorio, pero este c¨¢lculo est¨¢ construido sobre la hip¨®tesis de la congelaci¨®n salarial para los 51.000 empleados auton¨®micos. Una hip¨®tesis en todo caso conflictiva, toda vez que los sindicatos no parecen dispuestos a renunciar a la subida del 8,5% pactada meses atr¨¢s en convenio con la Administraci¨®n. Ya el pasado a?o, el Consejo Vasco de Finanzas recomend¨® congelar el sueldo de los altos cargos y atenuar en lo posible la subida de los sueldos de los funcionarios. Portavoces de la Administraci¨®n han indica do que la subida de los sueldos de los funcionarios acarrear¨ªa el reajuste de unos presupuestos ya recortados y el tijeretazo a alguna de las partidas, como la destinada a gastos sociales o inversi¨®n, que el Gabinete de Jos¨¦ Antonio Ardanza no quiere tocar.

La ca¨ªda de la recaudaci¨®n, estimada en un 9,5% de los in gresos previstos, ilustra, desde luego, sobre el alcance de la crisis y acrecienta el peso del gasto corriente de la Administraci¨®n vasca en los menguados presupuestos p¨²blicos. El descenso en la recaudaci¨®n coincide, justamente, con la elaboraci¨®n del plan de reforma de la Administraci¨®n encargado por el pleno del Parlamento aut¨®nomo, un plan que trata de optimizar y racionalizar servicios y recursos humanos en cada uno de los departamentos y eliminar algunas de las duplicidades existentes entre el Gobierno y las poderosas diputaciones vascas, adem¨¢s de plantear la supresi¨®n de alguna de las sociedades p¨²blicas.

Enrique Portocarrero, director del C¨ªrculo de Empresarios Vascos, es de los que creen en la urgente necesidad de reformar la actual Administraci¨®n aut¨®noma. "Hay que simplificar el entramado institucional para hacerlo menos costoso y m¨¢s eficaz", afirma. Mario Fern¨¢ndez, ex consejero de Trabajo del Gobierno vasco, cree que ha llegado el momento de abrir un debate general y a fondo sobre la capacidad de la actual Administraci¨®n aut¨®noma vasca para hacer frente a la crisis. "Si el mercado laboral es r¨ªgido, qu¨¦ podemos pensar", indica, "de los obst¨¢culos legales, a veces irresolubles, que suscita, por ejemplo, el traslado o el simple cambio de puesto de los funcionarios".

Javier Olaberri, ex diputado vasco de Euskadiko Ezkerra (EE) y ahora concejal independiente de San Sebasti¨¢n, considera que los 70.000 millones no recaudados por las haciendas vascas -"el doble del presupuesto de Industria del Gobierno vasco"- constituye "un verdadero terremoto en las finanzas" de una Administraci¨®n que "ha ido creciendo alegremente, practicando el clientelismo, sobre la base de fuertes ingresos y escasos compromisos iniciales de gasto".

El ex parlamentario vasco se pregunta de d¨®nde sacar¨¢ ahora el Gobierno vasco, formado por el PNV y el PSE-EE, la autoridad moral necesaria "para suprimir puestos funcionariales creados por los amigos del partido, subvenciones otorgadas con criterios de clientelismo y obras fara¨®nicas que buscan el halago y no la utilidad". A su juicio, el fondo del asunto no es la "t¨ªmida reforma de la Administraci¨®n aut¨®noma que prepara el Gobierno, sino la Ley de Territorios Hist¨®ricos (LTH) y las amplias competencias que esa ley otorga a las diputaciones, verdaderos gobiernos provinciales".

Problema pol¨ªtico

Sin llegar a cuestionar la LTH -tema tab¨² dentro del PNV por los dolorosos conflictos internos que supuso-, pero s¨ª la interpretaci¨®n y aplicaci¨®n "foralista" de esa ley, un estudio del C¨ªrculo de Empresarios Vascos critica la duplicidad, solapamientos y yuxtaposiciones de funciones entre las diputaciones y el Gobierno vasco, y concluye que esa falta de coordinaci¨®n responde a una determinada voluntad y concepci¨®n pol¨ªtica.

Desde una posici¨®n cautelosa, el ex consejero de la Presidencia Juan Ram¨®n Guevara, tras advertir que "se confunde el modelo con su concreta aplicaci¨®n" y que en Euskadi se ha utilizado el modelo para "intentar dirimir otras cuestiones", se?ala que hay que racionalizar el debate. "Hay que ir a los temas concretos, a los problemas reales, y buscar soluciones con imaginaci¨®n y valent¨ªa". "El problema", a?ade, es fundamentalmente pol¨ªtico, y como tal debe ser tratado".