El Consejo Europeo propugnar¨¢ revisar los planes de convergencia para hacerlos m¨¢s realistas

Las primeras orientaciones de pol¨ªtica econ¨®mica que realizar¨¢ el Consejo Europeo en diciembre, en cumplimiento del Tratado de la Uni¨®n Europea, ir¨¢n en el sentido de pedir a los Estados miembros que actualicen sus programas de convergencia y que los hagan de forma "cre¨ªble y coherente", seg¨²n se desprende del documento aprobado la pasada semana por la Comisi¨®n Europea. Ese documento servir¨¢ de base de discusi¨®n de los jefes de Gobierno y de Estado que se reunir¨¢n en Bruselas en la cumbre fijada para los d¨ªas 10 y 11 de diciembre.

Estas orientaciones pol¨ªticas constituyen un hecho ins¨®lito en la historia de la Comunidad, pues deber¨¢n aprobarse por mayor¨ªa cualificada y ejercer¨¢n una importante presi¨®n sobre los responsables de las pol¨ªticas nacionales y sobre los agentes sociales.

La Comisi¨®n Europea est¨¢ sumergida en una semana de debates sobre el futuro de la econom¨ªa europea, que empez¨® con la aprobaci¨®n hace justo siete d¨ªas del documento titulado Restaurar el crecimiento y el empleo. Reforzar la convergencia, sigui¨® ayer con la revisi¨®n del grado de convergencia de las econom¨ªas de los Doce y culminar¨¢ hoy con la discusi¨®n de los problemas macroecon¨®micos en torno al Libro Blanco sobre el Empleo, la Competitividad y el Crecimiento, el documento que deben aprobar los Doce en diciembre como programa de combate contra el paro para los pr¨®ximos a?os.

Una parte de este intenso programa de discusiones viene dictado directamente por el calendario de la Uni¨®n Econ¨®mica y Monetaria previsto por el Tratado de Maastricht, y debe preceder a la entrada en la segunda fase de la marcha hacia la moneda ¨²nica. A la hora de la verdad, sin embargo, los tres ejercicios de revisi¨®n de las econom¨ªas estar¨¢n supeditados a lo ¨²nico tangible que tienen ante s¨ª los Doce y que es precisamente la divergencia de sus econom¨ªas y los niveles alt¨ªsimos de paro.

Novedad y ortodoxia

Respecto a la convergencia, la nueva teor¨ªa en boga es la adaptaci¨®n de los programas a las nuevas condiciones, pero a la vez confirmando toda la ortodoxia de la disciplina establecida en el Tratado de Maastricht. La discusi¨®n el pr¨®ximo lunes en el Ecofin (Consejo de Ministros de Econom¨ªa) de los programas de convergencia de Alemania y Francia, objeto de una concertaci¨®n bilateral previa, tendr¨¢ un cierto car¨¢cter ejemplar, y dar¨¢ el tono de lo que deber¨¢ ser la revisi¨®n de programas de los otros pa¨ªses. Por el momento, la Comisi¨®n asegura que "los programas de convergencia tienen un papel crucial en simbolizar el grado de compromiso de cada uno de los pa¨ªses en lo que puede describirse como un programa audaz de crecimiento y una estrategia de empleo para el a?o 2.000". El calendario de la Uni¨®n Econ¨®mica y Monetaria debe tambi¨¦n ser rigurosamente respetado, seg¨²n el documento.

Este mismo documento propone como objetivo rebajar el paro en la CE hasta el 5% o el 6% en el a?o 2.000, crear las condiciones para un recorte de los tipos de inter¨¦s en dos o tres puntos, y situar el crecimiento entre el 3% al 3,5% entre 1995 y 1996.

La Comisi¨®n apenas entra en cambio en dos de los debates m¨¢s vivos planteados en las ¨²ltimas semanas: el primero, el trabajo compartido y el acortamiento de la semana laboral; y el segundo, las pol¨ªticas de relanzamiento de la actividad mediante grandes inversiones euorpeas, al estilo de la Iniciativa de Crecimiento Europeo, propugnada por Delors como terapia a corto plazo para actuar como revulsivo ante la prolongaci¨®n de la crisis.

Empr¨¦stito europeo

El Partido de los Socialistas Europeos est¨¢ elaborando, precisamente, la idea de lanzar un gran empr¨¦stito de nivel europeo, que proporcione 250.000 millones de ecus (Y75 billones de pesetas), la cantidad calculada para producir un relanzamiento de la actividad y resolver a la vez los problemas m¨¢s importantes de vivienda social y de transportes p¨²blicos detectados hoy en Europa.

Las f¨®rmulas que apunta la Comisi¨®n para el objetivo de crear 15 millones de puestos de trabajo en los pr¨®ximos seis a?os se hallan, en cambio, en la misma l¨ªnea cl¨¢sica de rigor presupuestario, recorte de tipos, moderaci¨®n salarial y flexibilizaci¨®n del mercado de trabajo.