?lbum familiar
Claustrofobia
Fotograf¨ªas de Mireia Sent¨ªs.
Galer¨ªa Motiarty. Aliruirante, 5, 1?. Madrid. Hasta el 15 de diciembre.
Homenaje a Gerardo Vielba
Fotograf¨ªas. Colectiva. Real Sociedad Fotogr¨¢fica. Pr¨ªncipe, 16. Madrid.
?C¨®mo exponer en una sala el ¨¢lbum fotogr¨¢fico m¨¢s personal? ?C¨®mo hacerlo, adem¨¢s, con esas instant¨¢neas -blanco y negro- que todos tenemos, aquellas de ese tama?o antiguo -inferior al de una postal-, pensadas para el recuadro de una billetera -el formato de la aut¨¦ntica y genuina fotograf¨ªa de domingo, la de los fot¨®grafos no fot¨®grafos-, que todos hemos hecho alguna vez sin pretensi¨®n alguna est¨¦tica o documental, sino por el mero goce del recuerdo?Quiz¨¢s sean estos los planteamientos previos, perfectamente resueltos, con los que conect¨® Mireia Sent¨ªs para dise?ar esta su ¨²ltima exposici¨®n: Clautrofobia. Recorrido a trav¨¦s de 183 tomas, peque?o formato que, a modo de pel¨ªcula neorrealista, nos hacen viajar intensamente por las claves iconogr¨¢ficas de quienes nacimos en los cincuenta acompa?ados de una banda sonora de nuestros sentimientos m¨¢s ¨ªntimos, propios del instante en el que ponemos la mano sobre un c¨²mulo de fotograf¨ªas familiares pegadas en un ¨¢lbum, api?adas en una caja de zapatos o galletas.
Un entra?able paseo de la mano de Mireia Sent¨ªs por un extenso repertorio de sus fragmentos fotogr¨¢ficos cotidianos, un videoclip que nos precipita en las singularidades de la vida individual, en una subjetividad profunda que, materialmente, fuera de contexto -del ¨¢lbum o de la caja-, colocadas en hilera sobre las paredes de una sala se transforman en categor¨ªa, recuperando las m¨¢s nobles -y na?f- funci¨®n de la fotograf¨ªa, la de su vocaci¨®n amateur, tan sana como apenas estudiada.
Dise?o opuesto
Simult¨¢neamente, se exhibe en Madrid una muestra cuyo dise?o es diametralmente opuesto a Claustrofobia. En la primera planta del n¨²mero 16 de la calle madrile?a Pr¨ªncipe, la ya hist¨®rica Real Sociedad Fotogr¨¢fica, en su recientemente restaurada sala de exposiciones y organizada por la Escuela de Madrid, rinde homenaje al fot¨®grafo, recientemente fallecido, Gerardo Vielba, quien, durante 26 a?os, fue su presidente. Muestra que re¨²ne originales en blanco y negro, tanto de los miembros hist¨®ricos de aquel colectivo -Cuallad¨®, Dolcet, Gordillo, Cantero, G¨®mez...- como de otros m¨¢s j¨®venes, que supieron adaptar sus claves est¨¦tica, principalmente la obsesi¨®n por la pulcritud del copiado y fotoacabado: Juan Manuel Castro, Cristina Garc¨ªa Rodero, Pilar Peque?o...
La fotograf¨ªa espa?ola, tradicionalmente acostumbrada a tomar tarde casi todos los trenes e hist¨®ricamente ingrata consigo misma, durante los ¨²ltimos a?os se ha sentido especialmente encandilada por la ranciedad de las formas del academicismo documentalista franc¨¦s, en blanco y negro, tanto est¨¦tica como t¨¦cnicamente.
Lamentablemente olvid¨® el purismo de unas fuentes m¨¢s cercanas, como las de la Escuela de Madrid o las del grupo AFA, m¨¢s leg¨ªtimas y pr¨®ximas que aqu¨¦llas. Un revival que ahora con absoluta vigencia supieron asumir algunos de los participantes de ¨²ltima instancia presentes en esta muestra.
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