El narcotraficante Pablo Escobar, abatido a tiros por la polic¨ªa colombiana en Medell¨ªn

De acuerdo con su ley, respondiendo a las balas e intentando huir del asedio policial, Pablo Escobar Gaviria, el hombre m¨¢s buscado del mundo, muri¨® ayer abatido por 15 agentes en un barrio situado al oeste de la ciudad colombiana de Medell¨ªn. El cuerpo perforado por los proyectiles del legendario rey de la coca¨ªna qued¨® tendido en el tejado de la casa en donde se hab¨ªa refugiado con su lugarteniente, ?lvaro de Le¨®n Agudelo, El Lim¨®n, tambi¨¦n muerto en el cerco.

El narcotraficante m¨¢s buscado cay¨® tras haber cometido el error de efectuar en los ¨²ltimos d¨ªas varias llamadas telef¨®nicas, a su familia y a una emisora de radio, que fueron interceptadas por la polic¨ªa. La ¨²ltima imagen que vieron ayer de Pablo Escobar los vecinos del barrio de La Am¨¦rica fue un cad¨¢ver con barba y los pies descalzos. Una especie de distante cortejo f¨²nebre, bajo un aguacero torrencial, sigui¨® desde los balcones y ventanas de las casas pr¨®ximas al refugio el traslado de los restos del narcotraficante hasta el dep¨®sito de cad¨¢veres. Algunos expresaron alivio y otros callaron.

"Ninguna naci¨®n ha hecho tantos sacrificio en esta lucha ni puede dar tantos resultados. Los colombianos no nos rendimos frente al mal. Hemos demostrado al mundo que ning¨²n delincuente, por poderoso que sea, puede derrotar la voluntad mayoritaria de una naci¨®n digna y valiente", afirm¨® el presidente, C¨¦sar Gav¨ªria, al dar parte oficial de la operaci¨®n, que para el Gobierno significa un gran triunfo pol¨ªtico. "Se trata de un paso definitivo en la direcci¨®n correcta", a?adi¨®.

Los 15 agentes que pusieron fin a la azarosa y convulsionada vida de Pablo Escobar fueron seleccionados entre los m¨¢s expertos en operaciones de comando del Bloque de B¨²squeda, contingente de 1.500 hombres, entre soldados y polic¨ªas de ¨¦lite, constituido en agosto de 1992 con el prop¨®sito de capturar al jefe del cartel de Medellin, un mes despu¨¦s de que se fugara, la madrugada del 22 de julio de ese a?o, de la c¨¢rcel de Envigado.

Tras la fuga de Pablo Escobar, el Bloque de B¨²squeda, apoyado por la agencia antidroga de Estados Unidos (DEA), realiz¨® unos 15.000 allanamientos, abati¨® a m¨¢s de 20 lugartenientes de Escobar, condujo a otros tantos a la rendici¨®n, decomis¨® 4.358 kilos de dinamita y se incaut¨® de 323 armas y 74 veh¨ªculos, seg¨²n el recuento que hizo anoche el director de la polic¨ªa, general Miguel Antonio G¨®mez Padilla.

En el ¨²ltimo a?o, la guerra abierta entre el aparato militar del narcotraficante y la polic¨ªa se cobr¨® la vida de tres oficiales, siete suboficiales, 103 agentes y seis miembros de la polic¨ªa secreta de acuerdo con la estad¨ªstica oficial. Desde 1984, Escobar, acumul¨® 20 procesos judiciales por narcotr¨¢fico, secuestro, terrorismo y autor¨ªa intelectual de los cr¨ªmenes del ministro de Justicia Rodrigo Lara, del periodista Guillermo Cano y del candidato presidencial por el Partido Liberal, Luis Carlos Gal¨¢n. A su aparato militar se le atribuye la muerte de m¨¢s de 1.000 personas por la explosi¨®n de coches bomba en Medell¨ªn, Bogot¨¢ y Cali, y de un avi¨®n en vuelo.

Una semana bajo vigilancia

El director de la polic¨ªa revel¨® que la presencia de Escobar en la casa donde fue sorprendido se hab¨ªa detectado desde hac¨ªa una semana, pero se actu¨® con cautela, a diferencia de operaciones anteriores, en las que el despliegue por tierra y aire y la complicidad de una extensa red de apoyo con la que contaba el capo le facilitaron la huida.

Unas versiones afirman que fue una llamada telef¨®nica, desde un pa¨ªs extranjero, a esa residencia del barrio Am¨¦rica la que permiti¨® a los cuerpos de inteligencia rastrear y localizar el paradero de Escobar. Otras indican que el operativo fue determinado por la llamada de un confidente que aspira a cobrar los siete millones de d¨®lares que como recompensa ofrec¨ªan los Gobiernos de Colombia y Estados Unidos. Pero las m¨¢s fiables parecen ser las del director de la polic¨ªa, Miguel G¨®mez Padilla, y el fiscal general, Gustavo Greiff, seg¨²n los cuales fueron varias llamadas telef¨®nicas efectuadas en los ¨²ltimos d¨ªas por Escobar a su familia y una emisora de radio las que se convirtieron en el error fatal que permiti¨® a la polic¨ªa localizar su guarida.

Lo que s¨ª es cierto es que Escobar nunca sali¨® del valle de Aburr¨¢, donde se ubica Medell¨ªn y su periferia industrial de cinco municipios; tal vez ¨¦se fue el ¨²nico punto de coincidencia con la polic¨ªa. As¨ª lo afirm¨® Escobar hace 15 d¨ªas en una carta que hizo llegar al corregidor de R¨ªo de Janeiro, Luis Pinto, y anoche lo verific¨® el propio general G¨®mez Padilla.

M¨¢s all¨¢ de la eficacia de los cuerpos policiales que ahora reivindica el Gobierno, pero que en su momento cuestion¨® De Greiff, la presi¨®n psicol¨®gica por su familia amenazada, y el err¨¢tico itinerario de fuga en busca de asilo en un pa¨ªs europeo, iniciado el s¨¢bado 27 de noviembre, por su esposa Mar¨ªa Victoria Henao, y sus hijos, Juan Pablo y Manuela, pudo ser decisiva en la captura y muerte del jefe del cartel de Medell¨ªn.

La misma noche que los Escobar Henao retornaron desde Francfort como deportados, porque el Gobierno alem¨¢n les neg¨® el asilo por su condici¨®n de parientes de un mafioso, la voz de Escobar irrumpi¨® en una emisora de radio de Medell¨ªn para decir al embajador de Alemania, Herbert Wockel, que esa actitud era "repugnante".

El mi¨¦rcoles, despu¨¦s de que el grupo paramilitar Perseguidos por Pablo Escobar (Pepes) emitiera un comunicado en el que afirmaba que nunca hab¨ªa atentado contra esposa e hijos del narcotraficante, pero que lo har¨ªa si ¨¦ste pon¨ªa en marcha un plan de secuestro a hijos de pol¨ªticos y notables, Escobar divulg¨® su ¨²ltima carta. Con su firma y la huella dactilar que acompa?¨® a todos sus pronunciamientos, se dirigi¨® a sus eternos enemigos, los sindicados jefes del cartel de Cali, los hermanos Miguel y Gilberto Rodr¨ªguez Orejuela, Jos¨¦ Santa Cruz Londo?o y Helmer Herrera, as¨ª como al brigadier Hugo Mart¨ªnez Poveda y a la direcci¨®n de la Polic¨ªa Judicial de Medell¨ªn.

A todos los llam¨® se?ores Pepes, atribuy¨¦ndoles su futura muerte al pasar recuento de los atentados de que fueron objeto ¨¦l y su familia desde 1984.