El eclipse de Nissan
La filial espa?ola de Nissan est¨¢ herida. P¨¦rdidas de 40.000millones de pesetas en 1993, un endeudamiento de 150.000 millones y un duro plan para reducir 1.500 empleos en los pr¨®ximos a?os lo avalan. Nissan Motor Ib¨¦rica debe adoptar un plan de choque para sobrevivir en un mercado cada vez m¨¢s saturado. Nissan -que ocupa a 144.000 personas en todo el mundo- emplea en sus plantas espa?olas a 6.900 trabajadores, una cifra superior a la de sus f¨¢bricas en cualquier otro pa¨ªs europeo.
La filial espa?ola de la multinacional japonesa Nissan Motor construye motores en las instalaciones de Cuatro Vientos, en Madrid; camiones y furgonetas en ?vila, y carretillas y veh¨ªculos industriales en Pamplona. As¨ª mismo fabrica veh¨ªculos en la factor¨ªa de la Zona Franca de Barcelona y tiene instalaciones auxiliares en Montcada i Reixach, tambi¨¦n en Barcelona.
La empresa ha acabado el ano con un horizonte desesperanzador. A pocos metros de sus instalaciones de la Zona Franca de Barcelona, Seat ya ha iniciado el desmantelamiento de su buque insignia: la cadena de producci¨®n de veh¨ªculos que ha fabricado desde el hist¨®rico 600 hasta el modelo Toledo.
En la comunidad de Castilla y Le¨®n, la filial japonesa trabaja a contrarreloj. Una directiva comunitaria obligar¨¢ antes de 1996 a construir nuevos prototipos de camiones menos contaminantes que los actuales. Nissan ya ha pedido ayuda por valor de 5.000 millones de pesetas a la Comunidad de Castilla y Le¨®n para reconvertir sus modelos y cumplir las directrices comunitarias.
De momento, la c¨²pula del grupo japon¨¦s ya ha dado un ultim¨¢tum. No destinar¨¢ ni una sola peseta m¨¢s a los camiones que se fabrican actualmente en Espa?a. Un portavoz de Nissan manifiesta que si las administraciones aportan 5.000 millones, "se garantizar¨¢ la continuidad de la fabricaci¨®n de camiones como m¨ªnimo hasta el a?o 2000".
Soltar lastre
Nissan no tiene m¨¢s remedio que soltar lastre. La compa?¨ªa perdi¨® 14.389 millones en 1992 y las deudas ascend¨ªan a 150.000 mill¨®nes de pesetas, casi tres veces la cifra de capital y reservas, que era de 53.000 millones. En 1993, las p¨¦rdidas habr¨¢n alcanzado los 40.000 millones. Y para 1994 la compan¨ªa prev¨¦ p¨¦rdidas cercanas a 20.000 millones. El objetivo, seg¨²n Juan Echevarr¨ªa, presidente de la empresa, es empezar a obtener resultados satisfactorios a partir de 1996, tras la reestructuraci¨®n de la filial espa?ola.
Niss¨¢n present¨® en noviembre a los sindicatos un plan de viabilidad que incluye suprimir 1.529 puestos de trabajo. De acuerdo con los sindicatos, 600 rescindir¨¢n sus contratos,. otros 600 se acoger¨¢n a jubilaciones anticipadas y a 329 se les aplicar¨¢ una regulaci¨®n temporal de empleo.
En esas medidas tambi¨¦n se prev¨¦ la congelaci¨®n de los salarios durante los dos pr¨®ximos a?os.
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