Redondo advierte al PSOE que se arrepentir¨¢ de la reforma laboral cuando pase 15 a?os en la oposici¨®n

Nicol¨¢s Redondo advirti¨® ayer al PSOE que cuando vuelva a pasar "15 a?os" en la oposici¨®n se arrepentir¨¢ de la "contrarreforma laboral" aprobada ayer y desear¨¢ recuperar el marco laboral pactado por los sindicatos con el Gobierno de centro-derecha de la UCD. A la vista del apoyo del 90% de los diputados a los tres proyectos de ley enviados por el Gobierno, los l¨ªderes sindicales Nicol¨¢s Redondo y Antonio Guti¨¦rrez se preguntaron si el Congreso es receptivo a las demandas sociales y lamentaron el "procupante divorcio" entre el Parlamento y la sociedad.

El secretario general de la internacional de los sindicatos libres (CIOSL), Enzo Friso, se desplaz¨® a Madrid para solidarizarse con los sindicatos espa?oles. Friso afirm¨® que al movimiento sindical no le queda otra salida que sacar a los trabajadores a la calle para enfrentarse al desempleo. Flanqueado por Redondo y Guti¨¦rrez, el l¨ªder de la CIOSL expres¨® su apoyo a las movilizaciones del d¨ªa 27, que han sido precedidas por protestas similares en Francia, B¨¦lgica, Italia y Jap¨®n. Nicol¨¢s Redondo dijo que los empresarios europeos se est¨¢n frotando las manos por la "contrarref¨®rma laboral" que se impone en Espa?a. No obstante, advirti¨® al PSOE que, cuando est¨¦ en la oposici¨®n, una de sus reivindicaciones ser¨¢ volver al punto de partida." Un Gobierno que toma medidas, pero en direcci¨®n equivocada, debe reconsiderarlas cuanto antes. No son medidas aisladas; son estrategias pactadas con Convergencia i Uni¨® (CiU) que defienden los intereses de los partidos conservadores, aplaudidas a rabiar por la CEOE", a?adi¨® Redondo, quien considera que la huelga del d¨ªa 27 tiene como objetivo corregir una pol¨ªtica que va en perjuicio de los pensionistas, parados, j¨®venes y el conjunto de la sociedad.

"En Par¨ªs se han movilizado 600.000 franceses contra la reforma de la educaci¨®n y el Gobierno ha retrocedido; en Italia y B¨¦lgica, tambi¨¦n. Si un 75% de los espa?oles se declara partidario del cambio en la pol¨ªtica econ¨®mica, ?por qu¨¦ aqu¨ª no se va a cambiar?", se pregunt¨® Redondo. "Cualquier Gobierno inteligente lo har¨ªa", concluy¨®.

Tanto Redondo como Guti¨¦rrez se mostraron seguros del ¨¦xito de la huelga y lamentaron que en ese momento se aprobara en las Cortes la modificaci¨®n de 35 art¨ªculos del Estatuto de los Trabajadores sin contar con el criterio de los sindicatos.?Es receptivo el Parlamento a las demandas de la sociedad?, se pregunt¨® Antonio Guti¨¦rrez. Redondo calific¨® de "preocupante" el divorcio que, a su juicio, se est¨¢ produciendo entre el Parlamento o la sociedad.

Confianza en el ¨¦xito

Convencidos del ¨¦xito de la convocatoria, los sindicalistas conf¨ªan en repetir la experiencia de las dos huelgas generales precedentes (1988 y 1991), tras las cuales forzaron al Gobierno a aceptar las reivindicaciones que hab¨ªan sido atendidas antes.

Ninguno de los dos dirigentes sindicales dan cr¨¦dito a la cifra de m¨¢s de 20.000 contratos basura que, seg¨²n la Administraci¨®n, se han firmado a principios de a?o acogi¨¦ndose a la modalidad de aprendices o de pr¨¢cticas. Guti¨¦rrez se?al¨® que a los servicios jur¨ªdicos de CC OO llegan ceses de contratos que han sido sustituidos por contratos basura.

Enzo Friso, secretario general de la Confederaci¨®n Intemacional de Organizaciones Sindicales Libres, manifest¨®: "No debemos caer en la trampa de creer que haci¨¦ndonos la competencia con salarios m¨¢s bajos aumentar¨¢n los empleos". En su opini¨®n, el movimiento sindical es v¨ªctima de la pol¨ªtica desplegada por los partidos de izquierda, incapaces de dar una alternativa al desempleo: "Est¨¢n en luna de miel con la derecha en contra nuestra. ?Para qu¨¦ les sirve entonces alcanzar el poder?".

Friso cree que todos los pa¨ªses industrializados se han contagiado del thatcherismo, que consiste en debilitar a los sindicatos y destruir las conquistas sociales obtenidas a lo largo de m¨¢s de un siglo por generaciones de luchadores. Esta actitud socava la democracia y el propio desarrollo econ¨®mico, ya que, seg¨²n ¨¦l, ¨¦ste s¨®lo se alcanza en sociedades democr¨¢ticas dotadas de sindicatos fuertes.

"Las multinacionales han impuesto iniciativas para aumentar la competitividad reduciendo el coste del trabajo. La demanda ha bajado; el poder de compra, tambi¨¦n. Resultado: 40 millones de desempleados en los pa¨ªses desarrollados y 1.000 millones que viven por debajo de los m¨ªnimos vitales en el Tercer Mundo", agreg¨® el sindicalista.