Belloch propone un l¨ªmite temporal para la reinserci¨®n de etarras

El ministro de Justicia, Juan Alberto Belloch, pretende que el Gobierno fije un l¨ªmite temporal a la oferta pol¨ªtica de reinserci¨®n de los presos de ETA, permanentemente abierta desde hace a?os. Belloch cree Regado el momento de cerrar el horizonte de la reinserci¨®n pol¨ªtica y considera que la oferta del Gobierno deber¨ªa agotarse coincidiendo con la aplicaci¨®n efectiva del nuevo C¨®digo Penal que prepara su gabinete y cuya entrada en vigor se estima para el a?o 1996.

Este planteamiento permite barajar un plazo aproximado de dos a?os, toda vez que el proyecto de C¨®digo Penal, que ser¨¢ presentado al Consejo de Ministros el mes pr¨®ximo, puede tardar un a?o en su tr¨¢mite parlamentario y otro m¨¢s hasta su aplicaci¨®n efectiva. A partir de ese momento, el Gobierno dar¨ªa por clausurada la v¨ªa de promover la reinserci¨®n colectiva dentro de ETA y dejar¨ªa que los mecanismos de reinserci¨®n persistieran ¨²nicamente en el ¨¢mbito legal penitenciario.Los presos de ETA quedar¨ªan as¨ª homologados al resto de los reclusos en la dependencia exclusiva de los criterios de los jueces a la hora de aspirar a las medidas, el tercer grado penitenciario, los permisos, y la libertad condicional, contempladas en el mecanismo de reinserci¨®n.

Fuentes del Ministerio de Justicia sostienen que en el ¨¢nimo del ministro no figura la posibilidad de ejercer al indulto gubernamental para los casos de terrorismo, una vez entre en vigor el nuevo C¨®digo Penal.

No a la oferta permanente

"Se trata de poner fin a la actual situaci¨®n de oferta permanente, de poner un tope definitivo para que los que quieran reinsertarse sepan que o lo hacen dentro de ese plazo o tendr¨¢n que atenerse, individualmente, como el resto de los presos, a lo que decidan los Jueces sobre su caso concreto". "Hay que acabar", indican esas fuentes, "con la idea de que los activistas de ETA pueden acogerse a la reinserci¨®n abierta por el Gobierno en el momento que consideren oportuno".Por otra parte, desde el Ministerio del Interior y desde los principales partidos vascos se ha reiterado la impresi¨®n, de imposible contraste, de que la mayor parte de los miembros de ETA actualmente encarcelados es favorable a la reinserci¨®n pero no se acoge- a esas medidas por temor a las represalias y a ser tachado de traidor. Lo cierto es que, en los ¨²ltimos tiempos, s¨®lo unas docenas de presos de ETA han llegado a dar ese paso.

Durante su mandato, el Gobierno socialista ha indultado a unos 80 miembros de ETA, en su mayor¨ªa antiguos miembros de la autodisuelta ETA Pol¨ªtico Militar. El proyecto de C¨®digo Penal prevee un endurecimiento de las penas por terrorismo, pero rechaza el cumplimiento ¨ªntegro de las penas, reclamado desde algunos sectores sociales, y mantiene la reinserci¨®n, incluso para los delitos de sangre, en coherencia con el precepto constitucional.

Recientemente, Juan Alberto Belloch ha afirmado que no ser¨ªa sensato negar por ley a un recluso la posibilidad de acortar su pena si demuestra estar en condiciones de reintegrarse a la sociedad.