Butros-Gali deja expedito el camino para que la OTAN bombardee posiciones serbias en Bosnia
Estados Unidos, el Reino Unido y Francia, os tres pa¨ªses con derecho a veto que nunca m conseguido elaborar en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas una pol¨ªtica conexionada respecto a la ex Yugoslavia, dieron ayer su respaldo al secretario general, Butros-Gali, en su intenci¨®n de solicitar bombardeos a¨¦reos en Bosnia incluso si las partes enfrentadas no lo aprueban. Labase a¨¦rea de la OTAN en Aviano (Italia) se encuentra desde ayer en alerta. Los objetivos de un eventual ataque se encuentran fijados desde hace tiempo, gracias a la informaci¨®n facilitada por los aviones radar.
"No es un dram¨¢tico giro en la situaci¨®n, pero el dato de que los tres pa¨ªses de la OTAN se hayan apresurado a apoyar al secretario general significa un paso importante en la direcci¨®n de usar la fuerza", coment¨® ayer un funcionarlo de la ONU. Un alto portavoz de la Administraci¨®n estadounidense dijo por su parte que la propuesta era 11 razonable" y asegur¨® que EE UU "est¨¢ totalmente preparado para participiar en bombardeos a¨¦reos".El embajador del Reino Un?do en la ONU, David Hannay, declar¨® que "los sucesos de los ¨²ltimos d¨ªas sobre el terreno han empujado a las Naciones Unidas hacia una posici¨®n m¨¢s firme". Un representante franc¨¦s tambi¨¦n indic¨® que su pa¨ªs recib¨ªa las propuestas de Butros-Gali como "un paso positivo".
El secretario general present¨® en la noche del viernes ante el Consejo de Seguridad un informe sobre sus diez d¨ªas de actividades en el exterior para poner al d¨ªa la agenda sobre Bosnia. Butros-Gali mencion¨® tres escenarios posibles para garantizar la distribuci¨®n de ayuda internacional en Bosnia. En dos de esas posibilidades se contar¨ªa con la colaboraci¨®n de las tuerzas en conflicto. Pero el tercer y m¨¢s probable escenario, aqu¨¦l en el que los contendientes no faciliten el trabajo de la ONU, como la distribuci¨®n de la ayuda, "implica un diferente nivel de acci¨®n militar", dijo Butros-Gali.
Aunque el Consejo de Seguridad aprob¨® ya hace meses la posibilidad de usar la fuerza para garantizar la distribuci¨®n de la ayuda humanitaria, ¨¦sta es la primera vez que el propio secretario general dice expl¨ªcitamente que si los serbios siguen impidiendo el trabajo de la ONU llamar¨¢ a los pa¨ªses de la OTAN ara que efect¨²en ataques a¨¦reos contra ellos.
Se ha dado a¨²n un paso m¨¢s: Butros-Gali dijo que, ante la urgencia de la situaci¨®n, la autor?zaci¨®n del uso de la fuerza ni siquiera tendr¨ªa que pasar por Nueva York. El propio representante del secretario general en Zagreb, Yasushi Akashi, en coordinaci¨®n con el jefe de los cascos azules, general Jean Cot, est¨¢ autorizado para dar la orden. Butros-Gali advirti¨® que esta posici¨®n podr¨ªa suponer el aumento de fuerzas sobre el terreno. Ah¨ª es donde radica el problema: ninguno de los pa¨ªses que tienen all¨ª tropas, entre ellos Espa?a, est¨¢ dispuesto a aumentar su dotaci¨®n. Al contrario, muchos desean retirarse.
Francia y el Reino Unido han pedido en el pasado el env¨ªo de fuerzas norteamericanas a Bosnia, pero la Administraci¨®n Clinton ha sostenido siempre que su Ej¨¦rcito ¨²nicamente se sumar¨¢ a una operaci¨®n de ese tipo cuando todas las partes involucradas en el conflicto hayan llegado a un acuerdo de paz.
El diario The New York Times revelaba un plan de la Administraci¨®n norteamericana que restringe el uso de fuerzas militares estadounidenses en misiones de paz. Washington ¨²nicamente se sumar¨¢ a los cascos azules en aquellos conflictos que amenacen la seguridad internacional, cuando se produzca una cat¨¢strofe que exija ayuda inmediata o cuando se haya observado una grave violaci¨®n de los derechos humanos.
El problema ruso
Aunque pueda pensarse que en Bosnia se dan al menos dos de esas. condiciones, EE UU s¨®lo est¨¢ dispuesto ahora a la participaci¨®n en bombardeos a¨¦reos y a suministrar armas a los musulmanes para que est¨¦n en mejores condiciones de defenderse. El env¨ªo de refuerzos a los cascos azules en Bosnia exigir¨ªa, por otra parte, una nueva resoluci¨®n del Consejo de Seguridad, y eso obligar¨ªa una vez m¨¢s a vencer la resistencia de Rusia, favorable a los serbios.
Si se fuerza la apertura del aeropuerto de Tuzla, que resulta vital para el suministro de ayuda humanitaria al norte y centro de Bosnia, y hay una. respuesta armada serbia, Butros-Gali y la OTAN tendr¨¢n la oportunidad de demostrar su verdera voluntad de compromiso. Radov¨¢n Karadzic, l¨ªder de los serbios bosnios, advirti¨® ayer que la reapertura del aeropuerto s¨®lo ser¨¢ posible si ¨¦ste es controlado por sus tropas, a lo que se opone la ONU. EE UU, entre tanto, est¨¢ convencido que los bombardeos acelerar¨ªan considerablemente la firma de la paz.
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