Los otros Sarajevos
Las cinco zonas de seguridad de la ONU, que viven una lenta agon¨ªa, se han convertido en una cruel farsa
Alejados de los focos de las televisiones, inaccesibles para la llegada de ayuda humanitaria, aislados entre escarpadas monta?as y fustigados sin piedad por la artiller¨ªa serbia desde hace casi dos a?os, los cinco enclaves musulmanes de Bosnia-Herzegovina, declarados zonas de seguridad por la ONU el 22 de mayo de 1993, asisten a una lenta agon¨ªa. M¨¢s de medio mill¨®n de vecinos y refugiados de Bihac, Gorazde, Srebrenica, Tuzla y Zepa contemplan como una farsa cruel aquella pomposa declaraci¨®n de la ONU que consideraba estas zonas bajo su protecci¨®n. Sin apenas presencia de periodistas ni de cascos azules, inc¨®modos testigos de la barbarie de los serbios, los musulmanes de estos enclaves soportan unas dur¨ªsimas condiciones de vida, al l¨ªmite de la supervivencia. Sin electricidad ni suministro de agua potable, con los hospitales da?ados por los bombardeos y dependientes de una irregular ayuda humanitaria, los habitantes de estos, otros Sarajevos han llegado a refugiarse en los bosques para vivir como en la Edad de Piedra.
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